El lenguaje de los perros no es igual que el nuestro y, aunque muchas veces parece que que les entendemos a la perfección, la realidad es que estamos confundiendo sus señales. Los lametones son una de las señales de calma que los tutores más malinterpretamos debido a nuestra visión antropomórfica. ¿Nos dan los perros besos por amor?
Que un perro nos lama para demostrarnos cariño es algo muy poco común, algo que tiene sentido si pensamos de qué forma se comunican entre ellos. ¿Por qué iba un perro a darnos un beso cuando entre ellos no lo hacen?
Lo más habitual es que si un perro nos lame sea por incomodidad o petición de espacio, aunque no quita a que aprendan a utilizar ese comportamiento para pedirnos cosas, tal y como nos explicaban Víctor Padilla y Alba Fernández, educadores caninos de la escuela Olfateando el mundo en este artículo.
Entonces, ¿qué significa que nuestros perros laman a nuestros bebés? Tamara Hernán, educadora canina especializada en la convivencia multiespecie a través de su proyecto 'Creciendo entre perros', explica que existen muchos mitos y verdades sobre los motivos y consecuencias de que los perros laman a nuestro bebé.
Los posibles motivos del lamido a nuestro bebé
"Los vídeos virales de las redes sociales en donde aparece un perro que chupa a un bebé promueven la idealización de una escena a la que se le está atribuyendo una interpretación antropomórfica que puede tener como resultado serios problemas para la convivencia", asegura. "Pensar que un perro que chupa a un bebé es únicamente porque le quiere es menospreciar la capacidad olfativa y comunicativa de los perros".
En este sentido, Hernán pone en valor la importancia de entender a nuestros perros, concretamente su lenguaje, ya que el desconocimiento es, según ella, "uno de los mayores factores de riesgo de que se pueda producir una agresión".
"El lamido en los perros tiene muchos significados, pero en el contexto de la crianza, es decir, cuando lo hacen con bebés o niños, lo más común es que lo haga para evitar que se mueva, calmar la energía del peque, explorar y conocer el olor y el sabor del bebé o para eliminar la fragancia del cuerpo del bebé", detalla Hernán.
También es frecuente que les llame la atención el olor de la cabecita y de la costra láctea o incluso la zona del pañal
En el caso de que lo haga por evitar que el pequeño se mueve, debemos interpretarlo claramente como una señal canina de incomodidad que, de hecho, también hacen con nosotros. "Puede querer evitar que no se aproxime más a él o que le toque", añade la educadora canina.
"También es muy frecuente que lo haga para calmarlo porque se siente sobrepasado (porque le falta acostumbrarse), algo común durante los primeros llantos y posteriores movimientos del bebé o cuando éste ya corre cerca del perro", agrega.
En cuanto a la exploración, debemos pensar que el olfato es el sentido más poderoso del perro, el cual se complementa con un órgano situado en la cavidad del paladar que comunica con sus fosas nasales (vomeronasal), a través del cual pueden "saborear el olor". "El olor a la leche en la boca, cara, manos y cuello del bebé es muy atractivo para los perros", explica. "También es frecuente que les llame la atención el olor de la cabecita y de la costra láctea o incluso la zona del pañal".
Por último, como lo normal es que al bebé se le haya puesto algún gel, aceite o crema, fragancias que no suelen gustarle a nuestros perros, es posible que éstos intenten eliminarlas a través de los lametones. Pero, "en ningún caso son besos de cariño, ni de hermano mayor".
No obstante, existen otros motivos por los que nuestro perro puede estar chupando al bebé, como una conducta reforzada. "Esto ocurre porque el perro se da cuenta de que cuando chupa al bebé obtiene nuestra atención", detalla Hernán.
"También puede ocurrir por instinto maternal (limpieza), que es más raro, pero puede darse en perras que ya han sido madres y/o aquellas que no están castradas", añade la educadora canina. "En este caso, es preferible evitar que lo haga y hablar con un profesional, ya que la perra puede empezar a comportarse con el bebé como si fuese su cachorro".
¿Es peligroso para la salud del bebé?
Otra de las grandes preocupaciones que existen ante los lametones de los perros es si pueden suponer un riesgo para la salud de nuestros bebés, ante lo cual Hernán es clara: "El riesgo cero de transmisión de zoonosis en la convivencia humano-animal no existe".
"Al estar más expuesto al contacto directo bucal con el entorno, la saliva del perro tiene un pH más ácido que el humano para matar microorganismos", explica. "Por ello, es más probable que tú le transfieras virus o bacterias que pueden hacerle enfermar a que lo haga tu perro a través de un lametazo".
Además, la educadora canina recuerda que "muchas de las bacterias que se encuentran en la boca de los perros son inofensivas para el ser humano". "Si hay lactancia materna, ya le estás pasando defensas relacionadas a los microorganismos de tu entorno y, además, esa exposición temprana también refuerza el sistema inmune del bebé", defiende aportando argumentos de los últimos estudios científicos al respecto.
"Sin embargo, todo en su justa medida: que nuestro perro pueda chuparle no significa que sea bueno que lo haga de forma compulsiva, ya que estaríamos hablando de un síntoma de inestabilidad emocional y/o estrés del perro", concluye.
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