Fijar y aumentar el tiempo de consulta, reducir las agendas médicas y facilitar cita con el profesional adecuado según la necesidad del paciente, son algunos de los puntos que incluye el nuevo modelo de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid. La Gerencia Asistencial de Atención Primaria enviará este martes el documento, que "unificará los procedimientos en la región", a los directores de los centros de salud y a las direcciones asistenciales, según informan desde la Consejería de Sanidad. Se espera que para finales de año el sistema se implemente en toda la región.
"El sistema busca mejorar la atención de los pacientes mediante la clasificación del tipo de consulta en las agendas de los médicos de Familia y Pediatría", exponen desde el departamento de Sanidad, dirigido por Fátima Matute. El sistema establece que los tiempos de consulta serán de 10 minutos en medicina Familiar y de 15 minutos en Pediatría. Hasta ahora, la duración de las citas se establecía valorando la presión asistencial y el número de pacientes en agenda. Esto implicaba que dependiendo del centro, el facultativo y el día de la semana, la dedicación disponible por paciente podía variar. "Con el modelo anterior, algunos médicos solo disponían de 5 o 3 minutos", explican desde la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts).
Este incremento es posible gracias a que se ha establecido un número concreto y limitado de pacientes en las agendas de los médicos y pediatras, con un máximo de 34 y 24 al día, respectivamente. De forma complementaria se han creado las agendas de adsorción de la demanda para que los profesionales que de forma voluntaria lo soliciten pueden atender los picos de sobrecarga asistencial, con una retribución adicional de 50 euros por hora.
"Era necesario fijar unos criterios unificados para que los centros sepan como deben actuar", expone la secretaria general de Amyts, Ángela Hernández. El plan es fruto de las negociaciones entre el Gobierno regional y organizaciones sindicales como Amyts que acordaron estas mejoras tras finalizar en marzo la huelga de Atención Primaria, donde se fijaron estos ratios de citas y un incremento salarial, entre otros temas. El modelo se ha extendido de forma progresiva en diferentes centros. A fecha de hoy el modelo de agendas está funcionando en 160 centros y el objetivo es "extenderlo a los 263 que componen el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) antes de que finalice 2023", según detalla la directora general de asistencia del Sermas, Almudena Quintana.
En el documento también se establece la necesidad de fijar el número de citas que los médicos pueden agendar, dentro de su cuota diaria, en función de si se requiere atención presencial, telefónica, consulta online, asistencia urgente, trámites sin presencia del ciudadano como la prescripción de una receta, seguimiento proactivo por parte del facultativo, o bien revisiones del niño sano, en caso de Pediatría. "Estos parámetros los establecerá cada centro en función de sus necesidades, ya que no en todas las zonas se requieren los mismos servicios", aclara la directora general.
Citas médicas con el profesional adecuado
Entre otros puntos, el Plan de Mejora de Atención Primaria incluye que los pacientes podrán solicitar que se les asigne cita con el profesional más adecuado para valorar y tratar su caso. "Hay una cultura de que el médico lo resuelve todo y se desconoce que se puede pedir cita con otro profesional como el odontólogo para tratar un flemón", explica Quintana. Desde los centros de salud se orientará para acordar una consulta con el facultativo del centro de salud especializado. "Con esto se ahorra tiempo y se evita que el médico de familia tenga que volver a derivar", añade. Los centros de salud disponen de una Unidad de Atención Específica integrada por matronas, odontólogos, fisioterapeutas o higienistas dentales.
Una vez se depure e implante el sistema armonizado, se espera modificar el sistema de citas de la Tarjeta Sanitaria Virtual. Ahora, en la aplicación, a la hora de seleccionar el facultativo que pase consulta, las opciones se limitan al Médico de Familia y el enfermero, pero se pretende, según adelanta Quintana, que "la aplicación oriente y recomiende el profesional que mejor puede valorar la consulta".
Todos estos puntos están orientados a liberar a los médicos de la sobrecarga que experimentan, compartiendo la gestión de las agendas, para así mejorar la atención de los pacientes y, además, establecer unos criterios unificados para toda la región. En los centros donde ya se aplica el modelo se ha observado una disminución de las listas de espera y un mejor servicio asistencial. Sin embargo, desde Amyts consideran que "el modelo es un parche" que sirve para afrontar la falta de médicos y pediatras.
Desde la Consejería de Sanidad llevan tiempo reclamando al Gobierno central un aumento en las plazas de médico interno residente (MIR) para paliar el déficit de profesionales. El departamento dirigido por Fátima Matute, aprobó la contratación de médicos extracomunitarios en las áreas de medicina de Familia y Pediatría para compensar la falta de profesionales. La consejera también anunció que no descarta ampliar la medida a otras especialidades.
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