Los socialistas andaluces están convencidos de que han jugado un papel determinante para que la Junta y el Gobierno central hayan iniciado un diálogo sobre Doñana, que supone en primera instancia posponer la aprobación de la proposición de ley sobre los regadíos. El PP-A, en cambio, afirma tajante que el PSOE "no ha tenido nada que ver" y que ha sido el impulso de la propia norma lo que "ha obligado" al Ejecutivo central a sentarse.

Poco ha durado así la paz firmada por el presidente andaluz, Juanma Moreno, y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, cuyo acuerdo alcanzado este martes han querido atribuirse un día después unos y otros. El PSOE-A ha reivindicado el papel que han desempeñado "desde el principio" tanto el partido como su secretario general, Juan Espadas, para la búsqueda de "soluciones".

Según la portavoz parlamentaria de los socialistas andaluces, Ángeles Férriz, el "único camino era el diálogo" y así se lo ha planteado Espadas a Moreno, ha dicho, "tanto en público como en privado cada vez que han hablado". En su opinión, además, "en la mente" del presidente de la Junta "nunca ha estado solucionar el problema", porque "sabía perfectamente" que la iniciativa legislativa "ponía en riesgo" una serie de cosas y, por tanto, era "totalmente irresponsable".

En esta línea, Férriz ha dado la "bienvenida" a Moreno "al sentido común y al sentido institucional a la hora de afrontar las cosas". Al tiempo que ha agradecido a la ministra que "nunca haya abandonado ese camino", y que haya demostrado "una altura extraordinaria institucional".

Algo menos impetuoso se ha manifestado el propio Espadas, que se ha mostrado satisfecho del "triunfo del diálogo y el consenso", que es "lo mejor para Doñana, para el territorio y para quien lo habita".

Moreno paraliza un mes más la proposición sobre los regadíos de Doñana para llegar a un acuerdo con el Gobierno central

En la bancada popular, en cambio, tienen una visión muy diferente y así lo ha manifestado el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, quien ha afirmado que Moreno "ha vuelto a demostrar que practica una política de diálogo constante". Y que, precisamente, han sido la Junta y su presidente "quienes han propiciado el diálogo" entre todos los agentes implicados.

El PSOE-A y Juan Espadas "no han tenido nada que ver", ha añadido el portavoz parlamentario del PP, Toni Martín, que afirma que la misma proposición de ley es la que "ha obligado" al Gobierno a dialogar. Y ha argumentado que cuando el líder de la oposición se reunió con Moreno el pasado mes de septiembre "no dijo ni una sola palabra sobre este tema".

Además, tanto Martín como Sanz, en línea con lo manifestado por el propio Moreno, han reiterado que la norma "no se ha retirado" y que "sigue sobre la mesa" a la espera de ver cómo se desarrollan las negociaciones en este próximo mes. De hecho, el presidente ha afirmado que si finalmente "no hay acuerdo", la PDL se aprobará "a finales de octubre".

El resto de grupos también han expresado este miércoles su opinión sobre el acercamiento entre la Junta y el Gobierno. Desde Vox, han insistido en criticar lo ocurrido el martes en San Telmo y han confiado en que la PDL "no se quede en el cajón".

Al contrario, Por Andalucía considera que la ley en cuestión "no es reformable" ni "enmendable" y "solo cabe su retirada", ya que, según la han calificado, "es un disparate". Adelante Andalucía ha ido un poco más allá y considera que el acuerdo es "la primera gran derrota de Moreno Bonilla esta legislatura" y demuestra, en opinión del grupo, que "la mayoría absoluta del PP cada vez refleja menos la realidad social de las calles de Andalucía".