Un estudio asegura que los perros responden mejor a la voz de las mujeres

A la luz de los resultados del estudio, parece que las mujeres se sienten más predispuestas y cómodas hablando en voz alta con los animales, utilizando una prosodia exagerada, como la que se usa con los bebés.

Un estudio reciente llevado a cabo por expertos en etología de la Universidad Eötvös Loránd en Hungría, ha revelado que el cerebro de los perros responde de manera más efectiva a la voz de las mujeres y a la prosodia exagerada.

Si bien previas investigaciones habían evidenciado que cuando nos comunicamos con perros empleamos un estilo de habla similar al dirigido a los bebés, no se había esclarecido si existía una sensibilidad neuronal específica en los caninos hacia esta entonación tan peculiar.

A través de resonancias magnéticas funcionales (fRM), los científicos encontraron notables similitudes en la manera en que los cerebros de los bebés y los cerebros de los perros procesan el habla con una entonación exagerada.

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Esta forma de comunicación, a menudo denominada habla infantil o lenguaje infantilizado, se caracteriza por tonos más agudos, pausas más extensas entre las palabras, variaciones armónicas casi musicales, y repeticiones. Derivado del término inglés motherese, este estilo de interacción verbal es coloquialmente conocido como 'maternés' (o 'paternés' en el caso de los padres) y es empleado para dirigirse a los bebés. Se ha demostrado que este enfoque de habla exagerada aporta innumerables beneficios al desarrollo de las habilidades lingüísticas, sociales y cognitivas de los niños pequeños.

Las mujeres hablan más con los perros que los hombres

En la prueba llevada a cabo por el equipo investigador, los perros de familia entrenados fueron expuestos a grabaciones que incluían el habla dirigida a perros, bebés y adultos por parte de 12 mujeres y 12 hombres en situaciones de la vida cotidiana.

Las resonancias magnéticas funcionales permitieron observar que los perros tienen regiones cerebrales que responden con mayor eficacia e interés al habla dirigida a perros y bebés, lo que representa la primera evidencia de que los cerebros caninos están sintonizados con el lenguaje que se utiliza específicamente para comunicarse con ellos.

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"Investigar cómo los cerebros de los perros procesan el habla dirigida a ellos resulta emocionante, ya que puede ayudarnos a comprender cómo la prosodia exagerada contribuye a un procesamiento eficiente del habla en una especie no humana que depende de distintas señales orales (por ejemplo, para seguir órdenes o comandos verbales)", explica Anna Gergely, coautora principal del estudio.

El segundo hallazgo del experimento fue la constatación de que los perros mostraban una reacción y sensibilidad más pronunciada cuando los hablantes eran mujeres. Este descubrimiento resulta un enigma y no puede explicarse por una respuesta ancestral a señales de su especie o por la exposición intrauterina a la voz de sus gestantes como es en el caso de los bebés. Los investigadores sugieren que estos resultados podrían servir como evidencia de que los perros han desarrollado una preferencia neuronal durante su proceso de domesticación.

"La sensibilidad del cerebro de los perros hacia el habla que utilizan las mujeres para dirigirse a ellos o a los bebés puede deberse al hecho de que las mujeres hablan con más frecuencia con los perros que los hombres", señala Anna Gábor, una de las coautoras del estudio, quien sugiere que esto también podría relacionarse con la prosodia más exagerada que a menudo emplean las mujeres al interactuar con los animales.