A Nacho le hicieron "las peores de las aberraciones humanas", pero ya se ha recuperado y busca un hogar

Nacho está en acogida, esperando a que aparezca su hogar definitivo.

En nuestro país hay, al menos 288.000 perros y gatos abandonados, cifras que aumentarían si los datos del informe anual sobre abandono y adopción en España realizado por la Fundación Affinity incluyesen también otras especies de animales de compañía como hurones, conejos, cobayas, entre otros.

Aunque las cifras de abandono parecen mantenerse, la realidad es que la situación en España tiene aún mucho por mejorar en materia de protección animal, a esperas de que el próximo 29 de septiembre entre en vigor la nueva Ley de Bienestar Animal, que pretende mejorar la vida de nuestros animales de compañía y aplicar más sanciones a aquellos que los maltraten o abandonen.

Mientras tanto, las asociaciones de protección animal continúan ayudando a perros abandonados como Nacho, que fue encontrado vagando por un pueblo de Badajoz en condiciones terribles, tal y como relatan las personas que lo rescataron.

Desde el refugio de Hachiko, su cuidadora relata que "tenía una cuerda atada a la cadera y el miembro expuesto en carne viva, fuera de la piel que recubre el pene y los testículos". "Era un caso que urgía por las temperaturas altas y el riesgo de infección", defiende.

Estos galgos no son nada tímidos. Acuden felices cuando nos ven con las correas en la mano, buscando mimos y salir un ratito a recibir nuevos estímulos. Eva, explicando el proceder de la protectora, junto a un grupo de jóvenes voluntarios pasan los fines de semana en ACUNR cuidando de los animales, los pasean, juegan con ellos y les dan los mimos que el tiempo que tienen les permiten. El voluntariado es esencial para sostener la labor de las protectoras.

Cómo ayudar a las protectoras de animales: "Siempre son bien recibidos los voluntarios, tanto dentro del recinto como fuera"

"Es un ángel"

Este galguito tiene alrededor de tres o cuatro años y, tras ser rescatado con mucha paciencia la asociación lo llevó al veterinario, donde llegaron a la conclusión de que "Nacho había sufrido las peores de las aberraciones humanas".

"Tuvieron que extirparle el pene al tenerlo necrosado, los veterinarios nunca habían visto algo así", lamenta Verónica, fundadora del refugio de Hachiko. "No entienden como estaba fuera de la piel. Le hicieron una uretrotomía, que es una especie de vulva y, tras mucha tristeza, Nacho aprendió a orinar y a ver la luz".

Desde su rescate, Nacho no ha sido un perro fácil, ya que recuperar la confianza en las personas le ha costado. No obstante, desde la asociación han hecho un excelente trabajo y, aseguran que ahora está recuperado y que cuenta con un carácter de diez.

"Es pura calma, agradecido, no se hace nada en casa, ni muerde nada... Es un amor", afirman. "Es ideal para convivir con gatetes, cachorros, perretes, niños... Tampoco tira durante los paseos, ¡es un gran amigo!".

Verónica desea una familia definitiva para él, asegurando que es "un ángel", pero lamenta no encontrar a nadie que quiera vivir con Nacho. "No sé cómo vuelve a confiar, son una especie tan fascinante que en su interior solo tiene cabida al amor", comenta. "Sé que su familia mágica anda por algún lugar".

Tanto para ayudar a la asociación a seguir rescatando perretes como Nacho, como si se está interesado en darle un hogar definitivo y responsable a este galguito, es posible contactar con la protectora de animales a través de sus redes sociales en este enlace.