La OCDE ha lanzado otro grito de alerta sobre los perniciosos efectos de la sequía como consecuencia del cambio climático en el campo español. En su informe, 'Políticas para el futuro de la agricultura y la alimentación en España', presentado este miércoles al ministro de Agricultura, Luis Planas, la organización asegura que España vive la peor sequía de la UE y está entre los tres países de la OCDE con mayor estrés hídrico, tan solo por detrás de Corea e Israel.

En su informe se centra en analizar la agricultura y ganadería y el papel que juegan ante la escasez del agua. "España tiene uno de los niveles más altos de estrés hídrico entre los países de la OCDE, y es probable que el cambio climático reduzca la precipitación media anual y aumente la frecuencia de sequías agudas". La agricultura, al ser el origen del 80% de la demanda de agua, sería uno de los sectores más afectados, se advierte.

OCDE

El informe destaca que el riesgo importante de reducción de la pluviometría debido al cambio climático afecta a "muchas regiones de España", reduciendo la precipitación media anual.

Como dato preocupante, revela que en octubre de 2022, España registró los niveles de agua subterránea más bajos para en una década.

La ola de calor reduce el agua embalsada en España, aunque se supera el nivel almacenado el año pasado por estas fechas

Poca agua y contaminada

Según la OCDE, aunque los datos más recientes muestran una mejora y un mayor compromiso con la mitigación del impacto ambiental de agricultura y ganadería, España no cumple sus compromisos de emisiones de amoníaco y gases de efecto invernadero.

El informe denuncia, por ejemplo, que en España "alrededor del 20% al 35% de las masas de agua subterráneas y superficiales están en riesgo de contaminación difusa por malas prácticas agrícolas, entre otras fuentes. Sin embargo, destaca esfuerzos recientes para combatirlo en zonas concretas como el Mar Menor (Murcia).

En sus conclusiones y consejos, la OCDE recomienda al Gobierno utilizar los "incentivos económicos, regulatorios y de gobernanza existentes" para abordar el desafío y la urgencia de las presiones hídricas de la agricultura y su capacidad de adaptación al cambio climático".

También "cuantificar y comprender la magnitud del problema de la extracción ilegal" y tomar medidas firmes para reducir las extracciones ilegales de agua. No sin antes "sensibilizar a los agricultores sobre el riesgo real de los acuíferos de los que extraen agua para riego".  

Alerta por las granjas porcinas

Al mismo tiempo, la OCDE asegura que "el fuerte incremento de la cabaña porcina ha supuesto un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero y de amoníaco, lo que se ha traducido en un incumplimiento constante de los techos de emisión de amoníaco en España. El uso de fertilizantes también ha aumentado en los últimos años, al igual que los excedentes de nitrógeno y fósforo. La contaminación por estos nutrientes está deteriorando la calidad de las aguas subterráneas y superficiales de España, aumentando los ya altos niveles de estrés hídrico y amenazando ecosistemas importantes".

Planas alaba la modernización del regadío

El ministro Luis Planas ha recibido este miércoles el informe de manos de  la directora de Comercio y Agricultura de la OCDE, Marion Jansen. Ante ella se ha comprometido a tener en cuenta las observaciones del organismo internacional "para avanzar hacia una agricultura cada vez más sostenible y rentable". 

El ministro ha valorado que este describe a la agricultura española como un sector altamente competitivo y exportador, particularmente en el ámbito porcino y hortofrutícola. En concreto, señala que el sector de la agricultura ecológica está mucho más desarrollado que en la mayor parte de los países vecinos. Así, España es el sexto país del mundo en superficie de agricultura ecológica, y segundo de la UE, a poca distancia de Francia. 

Además, aunque el informe se señala que el agua es uno de los principales condicionantes de la agricultura española, "constata que el uso de agua y de energía se ha reducido en la agricultura española entre 2011 y 2019". El ministro ha hecho referencia a la modernización de regadíos impulsada por el Gobierno para ahondar en el ahorro hídrico y contribuir a la mejora de la renta de los agricultores.

Más sequía en 2023

Esta semana también el Servicio de Cambio Climático del sistema satelital Copernicus alertaba de registros sin precedentes en lo que se refiere a los niveles de calor y a los relativos a la sequía en Europa y advertía de que 2023 iba por el mismo camino. Entre las conclusiones, Copernicus destacaba que en 2022  "Europa vivió el segundo año más cálido desde que hay registros" y que, debido a las olas de calor extremas de los meses estivales, "el sur de Europa registró el mayor número de días con 'estrés térmico muy fuerte' jamás registrado". El problema está en que no se trata de algo puntual, sino que parece que la tendencia se va a mantener, al menos, en los próximos meses.

España y Portugal son a día de hoy los dos países más afectados por la sequía según datos del Observatorio Europeo de la Sequía, EDO (European Drought Observatory). El mapa correspondiente a a los primeros 10 días de junio revela que la situación de la península Ibérica es "crítica". En España, desde que arrancó el año hidrológico, las precipitaciones han sido escasas. Pocas precipitaciones en global y temperaturas por encima de lo normal desde otoño, han hecho que el panorama, entrando en verano, no sea nada positivo, según eltiempo.es.