La forma de llover y la evaporación impiden frenar la caída del nivel de los embalses pese a las últimas lluvias

Evolución del agua embalsamada en España
Evolución del agua embalsamada en España
Ministerio para la Transición Ecológica
Evolución del agua embalsamada en España

A pesar de las fuertes lluvias que se viven en toda la Península desde hace semanas, la sequía sigue sin remitir y los embalses se sitúan esta semana en el 47,42% de su capacidad, un 0,1% menos que la semana anterior, según los datos que proporciona el Ministerio para la Transición Ecológica. 

De esta forma, la reserva hídrica española sigue cayendo por novena semana consecutiva y se sitúa actualmente en los 26.588 hectómetros cúbicos de agua acumulada. Esta cifra está por debajo de los 27.489 hectómetros cúbicos que presentaban los embalses el año pasado durante la misma semana. 

Así, pese a que las tormentas han sacudido gran parte del país y han dejado grandes trombas de agua en varios puntos del territorio español, la sequía no da tregua y los embalses pierden esta semana 52 hectómetros cúbicos de agua. 

Los datos son todavía más alarmantes si comparamos con el agua acumulada en los embalses durante los últimos 10 años. De media, estos números se sitúan en los 37.939 hectómetros cúbicos, por lo que a día de hoy los embalses cuentan con un 30% menos de agua acumulada.

Para encontrar los embalses en un nivel similar en la semana 23 del año habría que remontarse 31 años, hasta 1992, cuando la reserva hídrica estaba al 46,58% de su capacidad. Así, en la actualidad este es el segundo año con menos agua embalsada en esta misma semana, según los datos del ministerio.

Por cuencas, los embalses más afectados por la sequía son los del Guadalquivir, (23,9%), Guadalete-Barbate (24,7%), las Cuencas internas de Cataluña (25,8%) y Guadiana (31,8%). Por otro lado, las cuencas hidrológicas que revisten menos gravedad son las de Cantábrico Occidental (89%), Cantábrico Oriental (87,7%), las Cuencas internas del País Vasco (81%) y Galicia Costa (79,2%). 

Más salida de agua que entrada

Pese a que el mes de mayo fue normal en cuanto a precipitaciones, con un valor medio de 60 litros por metro cuadrado que incluso superan en seis puntos porcentuales el valor normal, el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Rubén del Campo, ha explicado por qué las lluvias considerables y generalizadas no han logrado elevar la reserva de agua embalsada. 

Del Campo ha indicado que, a pesar de las lluvias, en balance hay más salida de agua que entrada, lo que hace que se siga mermando su capacidad. 

Además, ha destacado que durante los últimos siete días las precipitaciones han sido en forma de chubascos que se han dado sobre todo por la tarde. Estos han estado acompañados de tormentas, por lo que no se ha tratado de lluvias continuas que hayan regado toda la superficie durante varios días o semanas, sino más bien chubascos, cortos pero intensos, que no han penetrado tanto en el suelo y además no tienen por qué caer en las cabeceras de las cuencas.

Otra razón por la que las precipitaciones no logran que la reserva crezca está en la evaporación, que ahora es más intensa que en invierno y, sobre todo, por la demanda de agua, que también ha crecido. "Probablemente, lo que ha llovido no haya sido suficiente para recargar la reserva hídrica en general", ha comentado. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento