El origen del chow chow, si bien lo podemos situar sin género de dudas en China, es desconocido en cuanto a cómo se desarrolló esta peculiarísima raza de inconfundible aspecto leonino, con una expresión de permanente ceño fruncido, su lengua azul, un andar rígido y una gorguera, o collar, de abundante pelo espeso. Uno de los últimos estudios genéticos sobre la raza establece su origen hace uno 8.000 años desde los perros nativos chinos, que actualmente se conocen como tugou y componen un diverso grupo de perros.
En el estudio, los autores también descubrieron que hubo un bajo flujo genético entre los chow chows y los perros autóctonos chinos. Esto sugiere que la creación de la raza fue relativamente rápida y se evitó cualquier mestizaje.
Presente en las leyendas chinas desde hace milenios, su existencia estuvo celosamente oculta para el mundo occidental hasta finales del siglo XVIII debido a las estrictas políticas chinas de restringir el acceso a la información relativa a su imperio.
Los primeros chow chows llegaron a Inglaterra durante el siglo dieciocho, pero no fue oficialmente presentada al resto del mundo hasta la exposición internacional de Crufts de 1925.
El origen de su nombre también es muy singular ya que se trata de un término en inglés, distorsionado del mandarín, que viene a significar baratijas, no especificado e incluso etcétera. Era el término con el que los comerciantes chinos describían los artículos pequeños, no detallados y diversos dentro de las cargas de los barcos. Se estima que, cuando los primeros ingleses adquirieron a estos exóticos perros, estaban incluidos en el informe portuario con el genérico chow chow, que acabaría por trasladarse como nombre propio a la raza canina.
La popularidad del chow chow tuvo su apogeo en todo el mundo en la década de 1980 y la primera mitad de los 90. Desde entonces, y según datos del Kennel Club americano, su presencia en nuestros hogares se ha reducido un 91%.
Devoto con los suyos, reservado con extraños y dominante con otros perros
Son perros tolerantes y muy protectores con todo su núcleo familiar, incluyendo niños, y con sus amigos, sean personas u otros perros, pero cabe señalar que no se consideran especialmente juguetones por lo que se desaconseja para quienes quieren introducir un ejemplar con la intención de que sea un compañero de juego para los menores de la casa. Por supuesto, al igual que con cualquier otro perro de buen tamaño y musculatura poderosa, se debe supervisar cualquier interacción con menores. Se consideran muy aptos para la convivencia con gatos u otros animales de compañía, pero en el caso de otros perros, es preferible que se haya criado con ellos. Los chow chows necesitan una socialización continua durante toda su vida, ya que pueden ser intolerantes y hostiles con perros desconocidos.
Físicamente, tampoco es un perro adecuado para ejercicios intensos o vigorosos. El chow chow necesita un ejercicio moderado en forma de paseos diarios. Tienen una alta predisposición al sobrecalientamiento corporal y los golpes de calor, por lo que requieren una gran atención en el caso de vivir en regiones muy calurosas y disponer siempre de acceso a sombra y agua fresca. En el adiestramiento, se debe ser constante y es más recomendable contar con la ayuda de un experto, ya que son tercos y rebeldes.
Su cuidado físico es exigente, y necesita un cepillado semanal para eliminar los pelos muertos de la gruesa subcapa y evitar los enredos. Hay que señalar que su nivel de desprendimiento también está por encima de la media de otras razas, por lo que vivir con un chow chow implica asumir la presencia de pelo en todas partes.
Debido a que se trata de una raza indudablemente llamativa y atractiva, es habitual encontrarse con anuncios de venta de dudosa procedencia y precios demasiado asequibles que debemos evitar a toda costa para no promover el tráfico de razas caninas criadas en malas condiciones. Para ampliar información y contactar con criadores legales y que proporcionen todas las garantías de salud y una crianza responsable recomendamos acudir a la Real Sociedad Canina de España. No disponemos de un club oficial de la raza en nuestro país, pero existen grupos en redes sociales que difunden casos de chow chows puros y sus cruces en adopción como Chow chow en Adopción en España.
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