A solo unas horas de que la junta de accionistas de Ferrovial avale la decisión de trasladar su sede social a Países Bajos, en una reunión prevista para este jueves, el Partido Popular ha criticado el modus operandi del Gobierno para tratar de evitar la marcha de la compañía al extranjero. Y, en concreto, la misiva remitida el pasado lunes por el Gobierno a la empresa. En este escrito, el Gobierno asegura que Bolsas y Mercados Españoles (BME) y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no han identificado ningún obstáculo que le impida a la empresa cotizar en Estados Unidos sin tener que cambiar su sede social a Países Bajos. Sin embargo, a ojos de varios dirigentes populares, esta carta enviada desde el Ministerio de Economía a la constructora oculta un "juego sucio" y una "amenaza" en lugar de un aliciente para quedarse en España.
Fuentes de la dirección nacional culpan al Gobierno de haber tensado la cuerda en exceso. "Llevan mucho tiempo denostando y atacando a la empresa, al autónomo y al emprendedor. Y eso tiene consecuencias, y nunca positivas". En el PP reconocen que "se debe apretar y exigir a todos un esfuerzo especial", eso sí, "no buscando culpables sino intentando encontrar soluciones a los problemas y no problemas a las soluciones".
Estas mismas fuentes sostienen que la carta que ha remitido el Gobierno a Ferrovial "no tiene tono ni sentimiento" porque cuando uno quiere "intentar defender su país para ser atractivo tiene que poner alfombra roja a los que generan inversión y empleo. Y en ningún caso atacar, polarizar, sino sumar porque no se puede perder a nadie".
Por ello, la oposición da por seguro que Ferrovial trasladará su sede al extranjero. Fuentes del grupo parlamentario creen "difícil" que la constructora rectifique su postura a un día día de la junta. "El Gobierno tendría que haber empezado por no insultar a la empresa y al empresario al más alto nivel", critican estas fuentes, que tildan la misiva de "juego sucio" y advierten de que habría sido "más oportuno" un comunicado de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
En el PP coinciden en que esta situación "se arregla hablando" en lugar de enviar una carta que "suena más a amenaza que a voluntad de defender con argumentos que la empresa mantenga su sede en España". Si Alberto Nuñez Feijóo fuera presidente, se habría "sentado con la empresa para analizar los puntos que dificultan su desarrollo", sostienen desde Génova, en sintonía con lo que ya dijo el líder popular en su día. Frente a los "insultos" que han vertido los dirigentes del Ejecutivo a la empresa y, en concreto, al empresario Rafael del Pino Calvo-Sotel, el líder popular aseguró que optaría por negociar con Ferrovial y daría incentivos a la empresa para evitar su marcha. Es decir, Feijóo receta negociar con Ferrovial y dar incentivos a los accionistas.
A raíz de la polémica desatada por la marcha de esta multinacional, dirigentes populares han llegado a la conclusión de que "España no parece 'business friendly' [que no es atractivo para atraer o mantener negocios] para las empresas grandes y con beneficios y el capital es libre. Las últimas amenazas fiscales todavía ayudan menos". Así, hay quienes abogan por apostar aún más por la flexibilidad a las empresas porque "cuantas más facilidades para salir, más entrarán".
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios