El Gobierno considera que Vox está utilizando un instrumento constitucional como la moción de censura de manera torticera. Pero, una vez confirmado que se celebrará con el economista y exdirigente del PCE Ramón Tamames como candidato, el Ejecutivo asegura que el presidente Pedro Sánchez se la va a tomar "en serio" por dos motivos: en primer lugar, para mostrar su "respeto" a las instituciones y, en segundo término, porque le servirá para confrontar "modelos" con el partido que lidera Santiago Abascal, que será el encargado de presentar a Tamames desde la tribuna.

Así lo aseguran fuentes del ala socialista del Gobierno, que aseguran que Sánchez tiene decidido participar personalmente en el debate de censura que tendrá lugar a partir del 13 de marzo, en una fecha aún por determinar. El presidente ya optó por responder personalmente en la moción presentada por Vox en 2020, aunque reglamentariamente no tiene la obligación de hacerlo. Y las fuentes del Ejecutivo aseguran que Sánchez "nunca" va a "descafeinar" el uso de un instrumento constitucional pese a que, a juicio de los socialistas, la forma en la que ha planteado Vox este debate sea un "esperpento".

En el Gobierno el foco no se pone en Tamames, ante cuya decisión tanto el ala socialista como Unidas Podemos han reaccionado con "respeto", si bien algunas fuentes admiten sentir cierto desasosiego ante la posibilidad de que el Congreso dé una imagen de teatro ante la opinión pública. El grueso de las críticas, en lugar de dirigirse al anciano candidato, se centran en Vox, aunque en el PSOE son amplia mayoría quienes consideran que la moción de censura viene bien al Ejecutivo porque le permite alejar el foco de cuestiones espinosas como la ley del sí es sí y que el centro de la atención mediática se sitúe en un debate y un candidato extravagantes.

Fuentes socialistas, además, señalan al PP como el partido que tiene una "papeleta" mayor que resolver a la hora de decidir su voto en la moción de censura. En la que presentó Vox en 2020, los populares votaron en contra y su entonces líder, Pablo Casado, se distanció muy claramente de Abascal durante su intervención. Pero, en esta ocasión, el PP ha dejado abierta la puerta a una abstención, aunque su presidente, Alberto Núñez Feijóo, criticó este jueves la iniciativa de Vox asegurando que proporcionará "una victoria parlamentaria a un gobierno convulso, dividido, en implosión".

Unidas Podemos, por su parte, considera que la moción de censura que ha presentado Vox revela que la formación es "inútil" a la hora de promover iniciativas que beneficien a los ciudadanos. Así lo señaló el presidente del grupo parlamentario morado, Jaume Asens, que aseguró este jueves que "en realidad" el texto va dirigido contra el PP porque le obligará a posicionarse ante un candidato elegido por Vox, su oponente principal en el campo ideológico de la derecha.