Dejar al perro más de 24 horas solo en casa o a un gato tres días sin supervisión será multado con entre 500 y 10.000 euros

  • La ley de bienestar animal considera grave dejar de forma habitual a perros y gatos en terrazas, balcones o patios.
  • El Congreso ha aprobado la polémica norma que debe pasa ahora enmiendas en el Senado antes de entrar en vigor.
Un gato mirando por la puerta de la terraza de su casa.
Un gato mirando por la puerta de la terraza de su casa.
REBECA MONCHOLÍ / PIXABAY
Un gato mirando por la puerta de la terraza de su casa.

El proyecto de ley de bienestar animal, que este miércoles ha pasado del Congreso al Senado, prohíbe en su artículo 27 dejar sin supervisión a un animal de compañía "durante más de tres días consecutivos", que en el caso de perros no podrá superar las "veinticuatro horas". Además, se prohíbe "mantener de forma habitual a perros y gatos en terrazas, balcones, azoteas, trasteros, sótanos, patios y similares".

Según la versión actual de la ley, como está publicada en el boletín oficial de las Cortes Generales, dejar al gato en la terraza o en un patio constituye una infracción grave penalizado con multas de hasta 50.000 euros.

Por su parte, la conducta de dejar sin supervisión al perro más de 24 horas y a otra mascota por un plazo de tres días sería una infracción leve, con sanciones que van del apercibimiento a multas de 500 a 10.000 euros.

Tras su paso por el Congreso, el proyecto de ley de bienestar animal arranca ahora su andadura en el Senado, donde este jueves concluye el plazo de presentación de enmiendas parciales y vetos de los grupos para la devolución de una norma cuya fecha limite de tramitación se ha fijado para el 9 de marzo.  

En vigor a los seis meses de su publicación en el BOE

La nueva normativa entrará en vigor a los seis meses de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), según el texto, aunque se recogen moratorias para facilitar la adaptación a las nuevas normas, por ejemplo para las tiendas de mascotas.

En la ley se regula el trato a los animales domésticos y los silvestres en cautividad, con el establecimiento de un listado de especies que estarán permitidas en los hogares.

Entre sus objetivos está erradicar el abandono y los malos tratos, con un endurecimiento de las penas y garantizar el bienestar animal, una cuestión de peso en España, donde casi la mitad de los hogares vive con alguna mascota.

El tratamiento de los perros de caza ha sido una de las cuestiones que más ha enfrentado a los socios de Gobierno y que podría verse diluida a nivel parlamentario, por falta de representación de Podemos en el Senado.

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