La Policía Nacional ha detenido en el municipio sevillano de Dos Hermanas a un joven de 23 años acusado de un delito de malos tratos físicos e incendio, después de que prendiera fuego a la vivienda de su expareja, que había salido del inmueble "escasas horas antes" con el bebé de siete meses que ambos tienen en común. 

La investigación se inició a raíz de una llamada al 091 el pasado 23 de enero en la que se alertaba de un incendio. Los Bomberos pudieron extinguir el fuego tras comprobar que este era de "grandes dimensiones", que llevaba un tiempo iniciado y que estaba presuntamente provocado para "causar el mayor daño posible". 

Y es que, según ha informado la Policía, el presunto autor usó acelerante en el mobiliario y una bombona de butano colocada "estratégicamente" en el foco del fuego que no llegó a explosionar, pero que de haberlo hecho podría haber causado daños incluso a los viandantes, al ubicarse la vivienda en una calle "muy transitada" de la localidad nazarena.

Los agentes sospecharon que el suceso podía estar relacionado con "disputas" entre la mujer que vivía en el piso y su expareja. Esta explicó en sede policial que venía "siendo víctima de malos tratos físicos por parte de su expareja desde hacía tiempo" y que en repetidas ocasiones le "amenazaba con quemarle la vivienda por disputas relacionadas" con el bebé que tienen en común.

Tras hacer una reconstrucción de los hechos, los agentes encontraron "pruebas que apuntaban que el incendio fue intencionado" y que "demostraban" que el autor "estuvo presente en el escenario". Dos días después, fue detenido y puesto a disposición judicial y se le intervinieron efectos que le implicarían directamente en la participación del incendio en el que, afortunadamente, solo ha habido que lamentar daños materiales.