La posible reforma del delito de malversación lleva una semana sobrevolando el panorama político desde que ERC abriera el debate tras la modificación de la sedición. Sin embargo, la maniobra no acaba de cuajar ni entre los socios de coalición ni tampoco en la opinión pública. Según una encuesta realizada por el Instituto DYM para 20minutos, el 71,1% de los españoles rechaza cualquier reforma del Código Penal que implique rebajar las condenas por malversación, algo a lo que solo el 10,6% de los encuestados es favorable.

A pesar del rechazo generalizado, el grado de desacuerdo varía entre el 61,2% del electorado de Unidas Podemos, el más favorable a una posible reforma de la malversación junto al del PSOE, y el 92,2% del electorado de Vox, más reacio, al igual que el de Ciudadanos (el 89,8% de los votantes la rechazan) y PP (79,5%). En la misma línea, el porcentaje de votantes de la formación morada que está de acuerdo con una posible rebaja de las penas por el delito de malversación es el más elevado: un 17,3%, frente al 10,6% de media y al 10,5% de apoyo de los votantes socialistas. En el extremo contrario, solo el 3% del electorado de Ciudadanos es favorable, por debajo incluso del dato de los votantes de Vox (4,7%) y PP (7,4%).

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En el seno del Gobierno también existen reservas en torno a la reforma del delito de malversación, planteada por ERC tras pactar la modificación de la sedición. Mientras el PSOE y una parte de Unidas Podemos se han abierto en los últimos días a estudiar una rebaja de las penas para aquellos casos en los que no exista un enriquecimiento personal, la parte mayoritaria de la formación morada, así como varios socios del Ejecutivo, teme que la reforma pueda beneficiar a condenados por casos de corrupción.

En estos términos, la reforma permitiría la rebaja de las condenas tanto a varios de los condenados por el procés como al expresidente socialista de Andalucía José Antonio Griñán, condenado por el caso ERE, pero también a dirigentes como el exministro del Interior del PP Jorge Fernández Díaz, acusado de malversación por desviar dinero público para espiar al extesorero de su propio partido, Luis Bárcenas. Todos estos antiguos responsables políticos fueron castigados en su día por utilizar el dinero público de forma ilícita, si bien no se lucraron directamente.

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De acometerse finalmente la reforma, el 56,3% de los encuestados considera que la maniobra afectaría negativamente al PSOE en las próximas elecciones, un dato que es ligeramente superior entre los propios votantes socialistas (58,8%). No obstante, el electorado de PP, Ciudadanos y Vox es mucho más crítico en cuanto al coste electoral de la reforma del delito de malversación, ya que más del 70% considera que le pasaría factura al partido de Pedro Sánchez.

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Por su parte, entre los votantes de Unidas Podemos, si bien el 52% cree que el cambio en el Código Penal afectaría negativamente al PSOE, uno de cada tres opina que no tendría ninguna influencia sobre el resultado de las próximas elecciones, al igual que el 24,2% de los votantes socialistas, por encima en ambos casos del 20% de media. Por el contrario, solo el 6,7% de los encuestados considera que la maniobra sumaría votos a los socialistas en los próximos comicios, un porcentaje que se eleva hasta el 8,4%, el 8,7% y el 9,1% entre el propio electorado socialista, el de Vox y el de Unidas Podemos, respectivamente.