Los empresarios españoles eligen este miércoles al nuevo presidente de la patronal en una cita en la que los socios de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) tendrán que elegir entre revalidar el mandato de su actual cabecilla, Antonio Garamendi o dar su confianza a Virginia Guinda, la alternativa de última hora que pretende aglutinar a las voces críticas. Aunque la vicepresidenta de la patronal catalana se muestra convencida de poder lograr los apoyos necesarios, organizaciones de gran peso ya han anunciado su respaldo a Garamendi.

El actual presidente, en el cargo desde 2018, parte como gran favorito. De hecho, la candidatura alternativa de Guinda llegó en el último momento, después del intento fallido de Gerardo Pérez, presidente de la patronal automovilística Faconauto, de unirse a la carrera electoral. Mientras que el escenario en el que el empresario vasco confirmó su voluntad de revalidar su mandato fue la propia reunión de la Junta Directiva de la patronal, en el mismo día en el que el órgano fijó la fecha de los comicios, su rival catalana anunció su decisión de dar un paso al frente hace apenas dos semanas, a cuatro días de que acabase el plazo para formalizar candidaturas, desde la sede de la Asociación Española de Cogeneración (ACOGEN).

Guinda, que es la primera mujer en aspirar a liderar la CEOE, procede de una de las patronales más críticas con la actual Presidencia, Foment del Treball. Uno de los movimientos más sonados de la organización catalana fue su abstención en la votación de la reforma laboral, un texto cuya aceptación a finales de 2021 le costó a Garamendi críticas no solo desde el interior de la CEOE, sino también por parte del PP. También la patronal madrileña, la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), encabezó la oposición interna al acuerdo alcanzado con los sindicatos y el Gobierno. 

En ese contexto, no es de extrañar que la rival de Garamendi se mostrara partidaria de una nueva reforma laboral en la presentación de su candidatura, en la que también pidió un "gran pacto de rentas" y un salario mínimo adaptado a cada sector. Precisamente las sucesivas subidas del salario mínimo, de las que la patronal se ha desmarcado, han sido uno de los escollos que ha tensionado en los últimos meses la relación entre la CEOE y el Ejecutivo, cuya vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha llegado a acusar a la patronal de no negociar.

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Tanto Garamendi como Guinda cuentan con una amplia experiencia en la representación de los intereses empresariales. El actual presidente llegó al cargo en 2018, tras presentarse por segunda vez a unas elecciones en las que fue el único candidato. Antes de sustituir al entonces líder de la patronal, Juan Rosell, quien le había vencido en 2014 por un escaso margen de 33 votos, Garamendi ya había sido presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), así como miembro de la junta directiva de varias patronales de su Vizcaya natal, entre ellas la Confederación Empresarial de Vizcaya, la Comisión Ejecutiva del Metal y la Cámara de Comercio de la misma provincia.

Por su parte, además de ser vicepresidenta de Foment del Treball, su rival forma parte de la junta de la CEOE desde 2018, ocupa el cargo de directora técnica en ACOGEN desde 2006 y es vocal del Colegio de Ingenieros de Cataluña. En su faceta empresarial, Guinda es directora ejecutiva de Iberboard, una mediana empresa dedicada al sector papelero. "Tengo una fábrica de cartón reciclado en Alcover (Tarragona). Exportamos el 65% de nuestra producción a 33 países y para ello cuento con un equipo humano de 150 personas", dijo a modo de presentación en el lanzamiento de su candidatura.

Además, la catalana, ingeniera industrial de formación y firme defensora de la reindustrialización de la economía, cuenta con experiencia en la gestión energética, puesto que, antes de adentrarse en el sector papelero, fundó una empresa de consultoría energética. En cambio, Garamendi, licenciado en Derecho y perteneciente a una familia de larga tradición empresarial, está más ligado a los sectores del metal, la construcción, el negocio inmobiliario, los seguros y la hostelería. De hecho, ha sido presidente de la naviera Marítima del Nervión y consejero en industrias como Tubos Reunidos o Aldecoa.

Los apoyos de cada candidato

La procedencia de los candidatos explica en buena medida los apoyos recabados por ambos candidatos. En concreto, Garamendi cuenta con el respaldo de patronales como la Asociación de Autónomos (ATA), la Confederación Española de Organizaciones Empresariales del Metal (Confemetal), la Asociación Nacional de Vendedores y Reparadores de Vehículos (Ganvam), la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (Ceaje), Cepyme, la Confederación Nacional de la Construcción (CNC), la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (Unespa) y la Agrupación de Fabricantes de Cemento de España (Oficemen), a las que en los últimos días se ha sumado la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), la Asociación Española de Proveedores de Automoción (Sernauto) y la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). También lo amparan todas las organizaciones territoriales, a excepción de la catalana, Foment del Treball, que apoya naturalmente la candidatura de su vicepresidenta.

Por su parte, Guinda presentó sus avales el pasado 8 de noviembre, el mismo día en el que se cerraba el plazo para oficializar candidaturas, cumpliendo con el requisito de disponer del respaldo de cuatro organizaciones diferentes integradas en la CEOE y 20 avales. La catalana ha recabada los apoyos de la patronal catalana, la patronal de cogeneradores industriales (ACOGEN), la Asociación Profesional Nacional de Gestores Administrativos (APNGA), la patronal automovilística Faconauto, la Federación Empresarial de Carnes e Industrias Cárnicas (FECIC) y el Colegio de Gestores Administrativos.

Estas son las credenciales con las que Garamendi y Guinda se presentan a las elecciones del próximo miércoles. Serán los socios quienes decidan quién ocupará la Presidencia de la CEOE durante los próximos cuatro años, un cargo que el vencedor asumirá en un momento clave por el elevado nivel de inflación y las movilizaciones convocadas por los sindicatos, con la negociación de una nueva subida del salario mínimo a la vuelta de la esquina.