El cara a cara que protagonizarán este martes en el Senado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo (en el que debatirán sobre el plan de ahorro energético y las medidas de España para responder al desafío de Putin) viene precedido de la disputa entre ambos por la reducción del IVA del gas que el Gobierno ha anunciado a partir de octubre. 

En realidad, más que una disputa, ha sido una rectificación exprés y una pedida de cuentas. Ni doce horas tardó el Ejecutivo en dar marcha atrás después de negar, primero, que fuera a aplicar la citada reducción que le exigía el líder del PP. El tiempo que transcurrió entre que la portavoz del Gobierno lo rechazase el miércoles por la noche y el presidente anunciase la medida el jueves por la mañana. "Se hará a rastras y después de insultar y descalificar al PP por proponerlo", dijo con cierto enfado Feijóo. 

El viraje acelerado de Sánchez -esa bajada al 5% del IVA del gas la lleva cinco meses reclamando el PP- abre una puerta al líder de los populares para retomar la presión al Gobierno y recordarle en la Cámara Alta que no han sido una, ni de dos, sino tres las medidas exigidas en los últimos meses por el PP y que el Gobierno ha despreciado para luego retractarse y presentarlas como propias, especialmente en materia de impuestos aplicados a la energía, como el Impuesto del Valor de la Producción de Energía Eléctrica (IVPEE), el IVA de la luz y ahora el IVA del gas.

El plan económico que envió el 22 de abril el entonces recién estrenado presidente del PP a la Moncloa proponía algunas rebajas fiscales a las energías que el Gobierno ha acabado aplicando. El Ejecutivo, por el contrario, no contempla por el momento otras propuestas impositivas como la rebaja del IVA a las gasolinas y el impuesto de Hidrocarburos.

Impuesto del Valor de la Producción de Energía Eléctrica

En marzo del año pasado, con Feijóo en Galicia y Pablo Casado como presidente del partido, el PP insistía al Gobierno en bajar el IVPEE del 7% al 0%. Los populares presentaron entonces una Proposición de Ley con esa intención, alegando que esta reducción fiscal "podría contribuir a la reducción de la factura eléctrica a todos los consumidores en una cuantía de entre 1.500 y 1.600 millones de euros al año".

No fue hasta el 21 de diciembre de este mismo año cuando el Gobierno publicó un Real Decreto en el que se establecía la "suspensión temporal del Impuesto del Valor de la Producción de Energía Eléctrica (IVPEE) por la difícil situación de los mercados energéticos". La primera vez en el último año que el Gobierno 'copiaba' una medida propuesta por el PP.

Aquel decreto volvía a la actualidad política este agosto debido a un epígrafe que determinaba la obligación de compensar a las eléctricas con el equivalente al importe del IVPEE, ya que lo recaudado por este impuesto estaba destinado a redirigirse a las eléctricas. Esa compensación de la que habla el escrito está incluida en el decreto de ahorro energético aprobado este verano, que establece "una aportación al sector eléctrico de 1.360 millones de euros procedente de los presupuestos generales del Estado de 2022".

IVA de la luz

Con su llegada a la presidencia del Partido Popular en abril, Núñez Feijóo centró su línea discursiva en los asuntos más cercanos a la economía de las familias, abanderando la necesidad de bajar los impuestos a la energía justo cuando la inflación comenzaba a hacer más mella en los hogares. Una de las propuestas que proponía era bajar el IVA de la luz al 5%.

El Gobierno, después negarle la rebaja al Partido Popular por considerarla una medida "cosmética" e "insuficiente", adoptaba la propuesta del principal partido de la oposición y en el Consejo de Ministros del 25 de junio decidió bajar al 5% el IVA de la luz que, un año antes, ya se había reducido del 21 al 10%. Feijóo, que consideró entonces acertada la decisión del presidente, le instó a ir "más allá" en la "copia" de sus propuestas económicas y achacó la rectificación del Ejecutivo a los intereses electorales del PSOE tras el varapalo en las elecciones andaluzas.

IVA del gas

Lo mismo que ocurrió entonces con la luz, ha sucedido esta semana con la rebaja del IVA al gas que anunció el Ejecutivo el pasado jueves. El Gobierno, a través de la propia portavoz gubernamental, Isabel Rodríguez, rechazó el miércoles la reducción impositiva por no considerarla prioritaria. "Aquellos que hacen este tipo de propuestas les diría que escuchen bien cuáles son las prioridades en el mundo y en Europa", señaló la portavoz. Apenas doce horas después, el presidente anunció en una entrevista radiofónica la aplicación de la medida a partir de octubre.

La reacción de los populares ha sido de nuevo el reproche a Sánchez, que según ha señalado Feijóo durante los últimos días, "descalifica" la propuestas del PP para acabar "copiándolas" demasiado tarde.

Las medidas que aún no ha aceptado Sánchez

El objetivo del líder de la oposición es continuar presionando y traer al debate en el Senado el resto de las medidas fiscales que aliviarían la economía de las familias y que el presidente del Gobierno rehúsa todavía adoptar. La deflación del IRPF y las rebajas al IVA de los combustibles y al impuesto especial de los hidrocarburos serán a partir de ahora las reclamaciones principales del Partido Popular en materia fiscal.

El líder popular también ha exigido esta semana -y se espera que vuelva a recordarlo el martes en el cara a cara con el presidente- que se alargue la vida útil de las centrales nucleares para moderar el precio de la factura eléctrica, que se instaure un cheque de doscientos euros por hijo para el inicio de curso y que asegure la gratuidad de las guarderías.