Varias diócesis españolas ofrecen a sus fieles cursos para leer bien en misa

  • Las clases estarán disponibles en varias provincias hasta el mes de mayo y regresarán a partir de septiembre.
Imagen de archivo de una persona leyendo la Biblia.
Imagen de archivo de una persona leyendo la Biblia.
PIXABAY
Imagen de archivo de una persona leyendo la Biblia.

Varias diócesis españolas ofrecen cursos a sus fieles para instruirles a leer bien en misa. La iniciativa la emprendió hace cinco años el periodista y locutor de radio y televisión Ángel Manuel Pérez, que ha diseñado una formación práctica intensiva de tres horas y media que ya han recibido feligreses de numerosas provincias eclesiásticas.

"Les enseño a los alumnos el manejo de la voz hablada y a que de verdad proclamen la palabra de Dios. También ofrezco claves para vencer el miedo escénico", explicó.

"La primera hora y media la empleo en destensar a los alumnos, llegan con mucho miedo e inseguros. Poco a poco van perdiendo el miedo en un ambiente distendido en la clase. En resumidas cuentas: les doy consejos prácticos y fáciles para que los utilicen en su vida de lectores en la Eucaristía. El resultado está siendo muy positivo, cada vez voy a más Archidiócesis y Diócesis de toda España. También me piden cursos desde Sudamérica", añadió.

Todo ello lo recoge en su web, que ofrece más información sobre estos peculiares cursos de formación con los que se "profesionaliza" la colaboración de quienes participan en las misas católicas con nociones de un experto en locución.

Hasta el momento han recibido las clases de Ángel Manuel fieles de Madrid, Sevilla, Toledo, Cuenca, Sigüenza-Guadalajara, Alcalá de Henares, Cádiz y Getafe.

"En mayo estaré en Madrid, Getafe, Algeciras y Sevilla; y en junio en Toledo, Madrid, Cuenca y Sevilla. En septiembre comienzo nueva temporada hasta el mes de junio del año que viene", detalló este formador que rememoró con cariño que "en una ocasión un lector se puso a llorar en plena clase al leer, por la emoción que le producía" y le animó para evitarlo y hacerse entender.

"Muchas personas que vienen a los cursos y no se atrevían a salir al ambón y ya lo hacen con alegría y normalidad, cosa que me alegra muchísimo, les insisto mucho que la Iglesia nos necesita a todos", zanjó.

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