Con casi un mes de retraso llegó la Conferencia de Presidentes de La Palma, que se celebró los días 12 y 13 de marzo, al pleno de la Asamblea de Madrid. La presidenta Isabel Díaz Ayuso fue llamada a comparecer por el PSOE para que diera cuenta de cuanto aconteció en la isla, pero la intervención apenas arrojó cuestiones novedosas o aspectos desconocidos de la cumbre que sirvió para acordar una respuesta gubernamental a la crisis derivada de la invasión de Ucrania. 

Desde la tribuna, Díaz Ayuso volvió a criticar la respuesta del Gobierno central a la coyuntura económica de inflación disparada y elevados precios de la energía. Tardía e insuficiente, dijo, para aseverar: "Entre Sánchez y Putin nos han hecho un 10% más pobres a los españoles". Recibió los aplausos de su grupo parlamentario y algún abucheo de la oposición. 

La corrupción opaca el control al Ejecutivo en la Asamblea: de la inédita 'defensa' de Ayuso a la diputada López a la trama del Ayuntamiento

La líder del Ejecutivo regional insistió en que se deben bajar los impuestos, algo que también le ha pedido este jueves Alberto Núñez Feijóo a Pedro Sánchez durante su encuentro en Moncloa, y también en que las comunidades deben recibir ayudas para afrontar el creciente gasto público. "Solo la factura energética (de la Comunidad) ha subido 539 millones", subrayó.

Ambas peticiones se juzgaron como incompatibles desde la oposición: sin recaudación no hay dinero para ayudas, resaltaron en el pleno. "Pide fondos... ¿de dónde se cree que salen?", le reprochó Mónica García, portavoz de Más Madrid, que afeó que la "única receta económica" del PP madrileño para salir de la crisis es la bajada impositiva. "Es lo que la lejía a la pandemia", opinó, para agregar: "Larga vida a los impuestos". 

La líder de la oposición insistió en hablar de la corrupción durante su réplica a la comparecencia de la presidenta, como también hizo la portavoz adjunta de Unidas Podemos. Alejandra Jacinto sugirió a la presidenta que acudiera a la Asamblea con este mismo formato a "explicar las comisiones de su hermano" y también defendió el pago de impuestos para mantener unos servicios públicos de calidad. 

Además, la diputada morada formuló algunas propuestas: limitar la subida del alquiler al 2%, aumentar la Renta Mínima de Inserción, rebajar el precio de los carburantes, ampliar el bono social... y consideró "una buena noticia" que el nuevo PP de Feijóo esté dispuesto a cerrar pactos de Estado con el Gobierno de coalición. 

También deslizó propuestas Juan Lobato, portavoz del PSOE, en materia de transporte público, para mejorar la oferta y las frecuencias y que sea una alternativa real a la locomoción privada, y también con ayudas a las familias madrileñas que peor lo están pasando con esta crisis. 

"No pienso pactar con el desastre", dijo Díaz Ayuso a modo de contestación a los grupos de la oposición en su siguiente turno de palabra. "No pienso pactar con los que están arruinando España (...) ni con quienes pretenden subir los impuestos a los madrileños", agregó en una larga enumeración de 'noes' a los partidos de la oposición.

Otro veto se llevó Rocío Monasterio, portavoz de Vox, que insistió en pedir a Díaz Ayuso la retirada de subvenciones a los sindicatos, como ya había hecho en la sesión de control. "Gobierne con valentía", alentó a la presidenta, "retire las subvenciones a los sindicatos que quemarán las calles cuando lleguemos nosotros a La Moncloa". Como hizo por la mañana, la presidenta aseguró que no puede laminar a estas organizaciones, que colaboran con la Administración, por ejemplo, en los cursos de prevención de riesgos laborales.