El Gobierno moviliza a 23.500 policías por el paro de transportistas y acusa a la "ultraderecha" de estar detrás

Varios camioneros durante la protesta que han realizado, este jueves, con motivo de la subida de los precios del carburante por la A 67
Varios camioneros durante la protesta que han realizado, este jueves, con motivo de la subida de los precios del carburante por la A 67
EFE/Pedro Puente Hoyos
Varios camioneros durante la protesta que han realizado, este jueves, con motivo de la subida de los precios del carburante por la A 67
El Gobierno ha movilizado a 15.000 agentes para reprimir las "conductas violentas".
EFE

Choque total entre el Gobierno y la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional, convocante de un paro indefinido que comenzó el pasado lunes y que amenaza con causar problemas de desabastecimiento en la cadena alimentaria. El Ministerio de Transportes ha comunicado que Interior ha movilizado a 23.500 agentes -16.476 guardias civiles y otros 7.122 policías- para "reprimir" las "conductas violentas" que, a su juicio, están llevando a cabo los organizadores de los paros con "palos, piedras y clavos". 

Además, la responsable de Transportes, Raquel Sánchez, ha asegurado que no se sentará con ellos al no reconocerles como "interlocutores" válidos: "No son representativos". “No estamos hablando ni de una huelga, ni de un paro patronal. Son grupos apoyados por la ultraderecha que utilizan la violencia y no la palabra para plantear sus reivindicaciones”, ha declarado Sánchez tras reunirse con agentes sociales y sindicatos en la sede del Ministerio, en el contexto de los encuentros de trabajo que están manteniendo los departamentos ministeriales del Ejecutivo para cerrar el plan nacional de respuesta a la crisis derivada de la guerra en Ucrania que aprobará el Consejo de Ministros el próximo 29 de marzo.

En ese encuentro sí ha participado el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC), organización que agrupa a la mayor parte de las asociaciones de transportistas, pero en el que no está representada la plataforma que convoca la huelga. Todo ello, pese a que el CNTC renovó su consejo “hace menos de un año”. La plataforma convocante “representa a quien representa, pero no al sector, sino a una minoría violenta”, ha remachado Sánchez.

En este sentido, la socialista ha insistido en la tesis de que detrás del paro, que ha provocado que la principal plataforma alimentaria del país, Mercamadrid, volviera a reducir ayer a la mitad la mercancía recibida, una caída que llega al 60%, están grupos de ultraderecha. “Está claro quién está dando apoyo y legitimando a aquellos violentos que pretenden amedrentar a transportistas que quieren trabajar”, ha continuado.

La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez se reúne con agentes sociales y representantes de las asociaciones profesionales del transporte, este jueves en Madrid.
Raquel Sánchez en la reunión de este jueves en Madrid.
EFE

Así, ha contextualizado la movilización de 23.500 agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en esos incidentes violentos ocurridos que, además, reafirman la intención de la ministra de no recibir a los convocantes. Según ha asegurado, la CNTC sí representa “al 90%” de los transportistas, por lo que no se va a reunir “con un grupo de radicales”.

La CNTC ve "insuficientes" las medidas del Gobierno

Por su parte, desde la Comisión Nacional de Transporte por Carretera han rechazado hasta el momento sumarse a las movilizaciones. Eso sí, ven insuficientes las propuestas del Ministerio, que aún no se han hecho públicas. A este respecto, Sánchez ha vuelto a prometer que bajarán el precio de los carburantes, aunque no ha definido cómo lo hará, si a través de rebajas fiscales o, como ha hecho Francia, subvencionando una parte del coste. “Vamos a bajar los precios del carburante y vamos a actuar de manera ágil e inmediata”, ha continuado la ministra, aunque ha insistido en que el plan con las medidas que buscarán paliar la crisis económica se aprobará el día 29, dentro de 12 jornadas.

En el marco de esas medidas, Sánchez ha asegurado que "se estudia" la congelación de los precios del alquiler ante la subida del IPC, que en febrero superó el 7%. Esta medida supondría la prohibición de que los pisos se revaloricen anualmente con la inflación, una idea propuesta por el sector de Unidas Podemos y defendida por la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y la ministra de Asuntos Sociales, Ione Belarra. “Se va a estudiar”, ha añadido la responsable de Transportes, que ha afirmado que el Ejecutivo “adoptará todas las medidas que sean necesarias y útiles” para minimizar la crisis.

La portavoz del Gobierno habla de "posicionamientos de ultraderecha"

Con otras palabras, la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno central, Isabel Rodríguez, también ha vinculado el paro en el trasporte a "una reacción que parece orientada por posicionamientos de la ultraderecha". A su juicio, el paro indefinido representa la "acción minoritaria de transportistas" que no ejerce el derecho "legítimo" a la huelga, sino que "boicotea al resto de trabajadores y al sector que en este momento tan complicado trabajan para garantizarnos los alimentos y productos de primera necesidad".

Tras un encuentro con el secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, en la sede del partido en Sevilla, la ministra ha advertido de que el Gobierno "no está dispuesto a aceptar chantajes de ningún tipo, y mucho menos a poner en riesgo la convivencia en nuestro país", en el que, ha dicho, con la "excusa" de la huelga se están produciendo incidentes "violentos" que ponen en riesgo "tanto la seguridad del abastecimiento como de los trabajadores".

En su defensa, el presidente de la Plataforma en Defensa del Sector del Transporte, Manuel Hernández, ha reprochado al Gobierno que alinee su protesta a la  'ultraderecha', cuando la plataforma que lidera es "rotundamente apolítica" y en ella no existe ningún tinte político, sindical, ni de ningún colectivo gubernamental "subvencionado". 

A su parecer, las anteriores declaraciones de las ministras forman parte de una estrategia del Gobierno para "desacreditar con la manipulación y colgando etiquetas ideológicas" al sector de base dentro del transporte, que es, según ha añadido a través de un vídeo de Facebook, "el que realmente lleva, mueve y trae las mercancías".

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