Tres de cada cinco menores de 35 años no pueden acceder a una vivienda por los altos precios del mercado

Un grupo de jóvenes sin mascarilla pasean por Sevilla.
Un grupo de jóvenes sin mascarilla pasean por Sevilla.
EP
Un grupo de jóvenes sin mascarilla pasean por Sevilla.

El 62% de los jóvenes de 18 a 35 años reconoce que no puede acceder a una vivienda en alquiler o en propiedad porque los precios del mercado son demasiado elevados para su presupuesto. Esta fue la respuesta más frecuente cuando se les preguntó por esta cuestión en un estudio elaborado por Fotocasa Research que se publicó el jueves.

El informe se difunde en un contexto en el que los precios de la vivienda en compraventa han vuelto a ganar impulso tras un 2020 más moderado. Según los últimos datos del Consejo General del Notariado, correspondientes al mes de julio, el precio del metro cuadrado es ahora un 2,2% más caro que el año pasado y se sitúa en los 1.475 euros, 32 euros más que en 2020. Los alquileres, sin embargo, han subido a aun ritmo mucho menor: apenas un 0,5% en términos interanuales según los datos del IPC de julio.

La investigación de Fotocasa, para la que la entidad entrevistó a 5.000 personas entre febrero y marzo de este año, refleja que cuatro de cada diez menores de 35 años participó en el mercado de la vivienda en el último año, el sector de la población más activo. De ellos, más de la mitad (59%) demandaba exclusivamente alquiler, un 27% exclusivamente compraventa y un 14% participaba en ambos mercados.

De entre todos los jóvenes encuestados el 14% consiguió alquilar una vivienda en el último año, un porcentaje que en 2021 ha recuperado los niveles anteriores a la crisis tras haber descendido tres puntos el año pasado. Además, otro 4% arrendó una habitación en un piso compartido y un 15% fracasó en su búsqueda de piso en alquiler. En el caso de la compraventa, solo el 3% de los menores de 35 sondeados adquirieron una vivienda el año pasado, frente al 13% que buscó pero no encontró.

El informe sostiene que los jóvenes ven la compra como una inversión y un seguro para el futuro, pero que recurren en mayor medida al alquiler porque los precios del mercado de compraventa son demasiado altos para su presupuesto. La mitad de los menores de 35 años que buscaba arrendar un piso el año pasado esgrimieron este motivo par hacerlo. Además de los precios del mercado, las otras razones más argüidas para alquilar un piso fueron la "libertad y flexibilidad" que da un arrendamiento (31%) y la movilidad laboral (30%).

En cambio, quienes acudieron al mercado para comprar lo hicieron en su mayoría motivados porque la vivienda "es una inversión a largo plazo", razón por la que apostaron el 48% de los encuestados. Ideas como que la vivienda es "un seguro para el futuro" o que alquilar "es una forma de ‘tirar’ el dinero" motivaron a un 40 y un 37% respectivamente de quienes buscaban piso en propiedad. 

Quieren mudarse por amor y se lo impide el dinero

Las razones más habituales para emprender la mudanza en los menores de 35, sea cual sea el régimen de propiedad, fueron mejorar la vivienda actual (35%) y vivir junto a la pareja (31%). En cambio, las más mencionadas cuando no consiguieron encontrar piso fueron, además de los elevados precios, la falta de vivienda adaptada a sus necesidades (48%) o la escasez de oferta en la zona donde se busca (32%).

En una escala del uno al diez, lo que más valoraron a la hora de buscar fue el precio (un 8,5), el número de habitaciones (7,4) o que tenga servicios cerca (7,2). Mientras que las características menos importantes fueron que tenga piscina (3,3), que sea buena zona de colegios (4) o que tenga trastero (4,3). El aspecto que más ha subido su valoración tras la pandemia es la presencia de balcón, que en 2021 se puntúa con un 6,6, ocho décimas más que el año anterior. 

Pese a que más de la mitad de los jóvenes menores de 35 años viven de alquiler, el 70% espera estar viviendo en un piso en propiedad en los cinco años próximos. Aunque una buena parte de estos jóvenes -uno de cada cuatro- ya es propietario o copropietario. Esta proporción se eleva especialmente en el segmento de 25 a 34 años, donde la tasa de propiedad es del 29%. En cuanto a la edad, la media del comprador es casi dos años mayor que la del arrendatario: 28,5 años frente a  26,8. 

Paro y bajos salarios

Que el desempleo y la precariedad laboral alejan a este sector de la población de la vivienda no es ningún secreto. Según datos de la Encuesta de Población Activa de agosto la tasa de paro en menores de 25 años ronda el 38,4%, una de las más elevadas de toda Europa. Además, quienes sí tienen un empleo también lo tienen difícil por sus bajos salarios. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el sueldo medio en este rango de edad en 2019 osciló entre los 9.101 euros anuales de los menores de 20 hasta los 20.969,5 de los adultos entre 30 y 34 años.

Para poder acceder a un piso en Madrid, donde el precio medio del alquiler ronda los 848 euros al mes -10.176 al año- cualquiera de estos grupos de edad tendría que dedicar la mitad de su sueldo o más solo a pagar su renta. Conforme desciende la edad, la dificultad de acceder a una vivienda disminuye. Los jóvenes entre 25 y 29 tendrían que dedicar casi el 60% de su sueldo -17.772 euros anuales de media- al alquiler y los jóvenes entre 20 y 24 el 80% de sus 12.640 euros anuales.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento