Según Comptos, este incremento se explica por las ayudas extraordinarias y urgentes concedidas para hacer frente a la crisis sanitaria y social causada por el Covid-19.
En concreto, precisa el órgano fiscalizador, de los 180 millones concedidos, 50 corresponden a empresas agrícolas y ganaderas, 48 a comerciales e industriales y 82 a otro tipo de empresas privadas.
Entre estas últimas destacan los 37,5 millones a autónomos y hostelería, 11,5 millones a Audenasa y 11,4 millones a centros especiales de empleo.
En cuanto al gasto por departamentos, Desarrollo Económico y Empresarial concedió 85 millones, Desarrollo Rural y Medio Ambiente 45 y Derechos Sociales 22.
La Cámara de Comptos ha revisado la legalidad de una muestra por importe de 30 millones, de los que 13 corresponden a ayudas para hostelería y turismo. La conclusión es que, en general, se ha cumplido la normativa aplicable.
El informe ofrece varias recomendaciones para mejorar gestión y control de las subvenciones. En este sentido, propone avanzar en la digitalización de los procesos para reducir "el elevado coste administrativo de gestión y comprobación de requisitos".
También recomienda simplificar las convocatorias de subvenciones, "buscando un equilibrio entre el necesario control y los requisitos y exigencias documentales".
Finalmente, la Cámara de Comptos pide "evaluar el impacto de las subvenciones mediante indicadores de seguimiento de objetivos". De este modo, "el análisis de las desviaciones producidas servirá para tomar decisiones en el futuro".
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