No habrá bajada del IVA para las peluquerías. Así lo confirmó este jueves la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, apenas 24 horas después de que el Senado se pronunciara a favor de rebajar ese impuesto durante la tramitación de una norma que, en principio, nada tenía que ver con medidas tributarias. El texto regresará ahora al Congreso, y Montero anunció que el Ejecutivo vetará esa enmienda e impondrá que el IVA siga en el 21% y no baje al 10%.

La titular de Hacienda precisó que el Gobierno "ejercerá su derecho a veto" porque modificar impuestos en normas ajenas a esa materia produciría "un desgobierno absoluto de nuestro país". La bajada del IVA para las peluquerías se introdujo mediante enmiendas en una ley contra el fraude, y Montero alertó de que no se puede abrir la vía a modificar impuestos "en leyes que no tienen nada que ver" y sin "analizar el impacto en las arcas públicas".

Ello supondría "poner en cuestión toda la política de ingresos y gastos", prosiguió, por lo que el Gobierno ejercerá sus competencias y vetará esa enmienda para asegurarse de que las previsiones presupuestarias son "ciertas".

Protestas del sector y voto del Senado

Este miércoles, el Senado aprobó la bajada del IVA de las peluquerías y servicios de estética del tipo general (21 %) al reducido (10 %), con el voto a favor de PP y el resto de grupos y único voto en contra del PSOE. Se da la circunstancia de que fueron los populares –en 2012, durante el Gobierno de Rajoy– quienes elevaron el tipo que soporta el sector del 10% al 21%.

En los últimos meses, y en paralelo a la caída de ingresos provocada por el coronavirus, el sector se ha movilizado para reclamar esta bajada de impuestos. La pasada primavera, peluquerías y centros de estética salieron a las calles para pedir que se rebaje el IVA al 10%, con el argumento de que eso impulsaría sus negocios.