Un cuarto cadáver ha sido localizado este viernes en la zona donde anoche naufragó una lancha neumática cerca del puerto de Órzola, en el norte de Lanzarote, según han informado fuentes del Consorcio de Emergencias de la isla. 

En el suceso fueron rescatados 41 supervivientes, entre ellos 19 mujeres y siete menores, además de los cadáveres de tres fallecidos -dos mujeres y un hombre El cuerpo ha sido avistado por el helicóptero que participa en las tareas de rescate de los cinco desaparecidos que todavía se buscan, entre ellos un bebé.

Los gritos se escucharon desde la costa

Fueron los gritos de los 46 subsaharianos que viajaban en la lancha neumática lo que alertó a los vecinos de la zona de Órzola . Antes de que llegaran Protección Civil y los distintos organismos de emergencias de Lanzarote,  muchos de ellos ya se habían lanzado al agua en su auxilio, según indició el gerente del Consorcio.

Gracias a la velocidad de la actuación de los vecinos y de protección civil 38 personas pudieron ser rescatadas, entre ellas dos niñas y otras tantas mujeres -una de ellas también embarazada, que fueron trasladadas al Hospital Doctor José Molina Orosa de Lanzarote con síntomas de hipotermia.

Todavía se busca a cinco migrantes desaparecidos, entre ellos un bebé. Para localizarlos, Un helicóptero con focos de rastreo sobrevuela desde este jueves  la zona de la Condesa en la que ocurrió el naufragio sobre las 21.50 horas, para tratar de localizar a los desaparecidos. Y ha sido precisamente este helicóptero el que ha localizado al último cuerpo, que eleva el número de muertos de este naufragio a cuatro, dos mujeres, una de ellas embarazada, un varón y el último cuerpo, aún sin identificar.

La embarcación provenía de Marruecos

De la embarcación se sabe que sus datos coinciden con los de la alerta de una salida de una neumática desde la costa de Guelmim, en Marruecos, a unos 270 kilómetros de distancia de Lanzarote.

Sus ocupantes lograron contactar brevemente por la tarde por teléfono con la ONG Caminando Fronteras, para avisar de que no sabían dónde se encontraban y de que tenían problemas con la navegación. La comunicación se interrumpió y no se pudo restablecer.