Cómo guardar el edredón nórdico, mantas y colchas ocupando el menor espacio posible

A pocos días de que comience el verano y con el aumento de las temperaturas, muchas personas ya han reorganizado el interior de su armario y han cambiado la ropa de cama por una colcha más fresquita. Una de las grandes preguntas al hacer estos cambios es: ¿dónde y cómo guardar el edredón o las colchas que ya no nos hacen falta? 

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Lo primero que hay que hacer es lavar y secar adecuadamente toda la ropa de cama que no vayamos a utilizar hasta el próximo otoño o invierno para eliminar cualquier rastro de residuos o de microorganismos acumulados. Cabe destacar que algunos tejidos, como puede ocurrir con el relleno del nórdico, requieren de un lavado especial por lo que es recomendable seguir las instrucciones del etiquetado.

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Una alternativa muy común es utilizar el canapé de la cama o cajas para guardar encima del armario o en el trastero. Pero una de las opciones más recomendadas para guardar las mantas o edredones sin que ocupen demasiado espacio es utilizar bolsas al vacío destinadas a este tipo de prendas.

"Únicamente necesitaremos una bolsa especial con una apertura para hacerle el vacío con un aspirador y reduciremos su volumen considerablemente a más de la mitad", aconsejan en la tienda de ropa de cama y hogar Zoest Home. Además, se pueden adquirir bolsas especiales y antipolillas que están disponibles en el mercado para evitar que la ropa coja mal olor al estar guardada durante varios meses.

En el caso de utilizar cajas de almacenamiento es importante que no sean de cartón, ya que este material puede atraer polillas u otros insectos. Así, la mejor opción es utilizar cajas de plástico o de un material resistente. 

Asimismo, a la hora de ordenar estas prendas es conveniente "poner etiquetas o pegatinas que nos ayudarán a saber qué hay dentro sin necesidad de abrirlas". Por último, el espacio elegido para guardar estas prendas tiene que ser un sitio fresco y seco para evitar que la humedad las deteriore.