El juzgado de Instrucción número 46 de Madrid ha citado como investigada a Teresa Arévalo. Arévalo, antigua trabajadora de Podemos y actual asesora del Ministerio de Igualdad, fue 'acusada' de ejercer de "cuidadora" de una de las hijas de Irene Montero y Pablo Iglesias por la ex responsable de cumplimiento normativo de la formación morada, Mónica Carmona, 

En la resolución, a la que ha tenido acceso 20minutos, el juez imputa a Arévalo y la llama a declarar dentro de dos meses y medio, el 14 de julio a las 12.00 horas, y sostiene que los hechos "presentan características que hacen presumir la posible existencia de una infracción penal".

En concreto, incoa diligencias previas por un presunto delito de administración desleal contra Arévalo y Montero, y ordena que se notifique la resolución a la ministra de Igualdad a través de la Comisaría del Congreso.

El instructor también cita, en este caso como testigos, al responsable de finanzas de Podemos, Daniel de Frutos; a la gerente, Rocío Val, y a un trabajador del área de seguridad, en este caso, para el 19 de julio. Además, quiere escuchar igualmente la testifical de la denunciante, Mónica Carmona, y de una antigua empleada del partido

Fuentes de Podemos, por su parte, sostienen que esta es "otra causa basada en falsedades" y vaticinan "que quedará archivada", aunque "sirve para generar titulares contra Unidas Podemos a tres días de votar en unas elecciones".

En esa misma línea, la directora del gabinete de Montero, Amanda Meyer, ha asegurado en Twitter que el auto demuestra que el juez "quiere entrar en campaña".

Una derivada del 'caso Neurona'

Las pesquisas en torno a Arévalo tienen su origen en una denuncia contra Podemos realizada por José Manuel Calvente –antiguo abogado del partido– y la citada Mónica Carmona.

A partir de esa denuncia original y del testimonio de ambos en sede judicial, se abrieron varias líneas de investigación sobre las obras de la sede del partido, varios contratos de campaña, salarios de trabajadores que podrían incumplir la normativa interna de Podemos y el fondo de solidaridad, que Calvente y Carmona calificaron de "caja B de Podemos".

Varias de esas líneas han quedado ya archivadas o sobreseídas a lo largo de casi un año de instrucción, mientras que otras siguen vivas, en especial la relativa a un contrato de campaña con la consultora Neurona. En la causa están imputados el partido y varios de sus dirigentes, pero no hay ninguna condena.

A lo largo del proceso, el juez pidió a Carmona más pruebas sobre los hechos originales, a lo que la antigua responsable de cumplimiento normativo del partido respondió ampliando su denuncia y proponiendo nuevas líneas de investigación, una de las cuales es la que afecta a Arévalo y a Montero.

Según el relato de Carmona, Arévalo –coordinadora del equipo de Montero desde 2019, antes de su llegada al Ministerio– hacía las veces de "cuidadora" de una de las hijas de la ministra y del ex vicepresidente Iglesias.

Para sustentar esa afirmación, aportó una fotografía donde se ve a Arévalo sostener a la bebé, así como una factura de billetes de tren para un acto del partido al que viajaron Montero, su hija –que en aquel momento tenía pocos meses de edad y era lactante–, Arévalo y otros tres trabajadores de la formación.

El juez del llamado 'caso Neurona' consideró que estos hechos no tenían ninguna relación con la causa original, por lo que decidió que debían investigarse por separado. Con la resolución conocida este viernes, el juzgado sobre el que ha recaído la causa inicia sus pesquisas para determinar si pudo cometerse alguna irregularidad.