María Jesús Moreno, más conocida como Maje, la 'viuda negra' de Patraix, y su examante Salva, se han reencontrado este miércoles en la Ciudad de la Justicia de Valencia, donde tendrán que declarar este jueves por el asesinato del marido de ella, un caso que comenzó como un crimen por amor y que a medida que avanzaba la investigación destapó una historia de infidelidades, mentiras y dinero.

Aunque no tendrán que prestar declaración hasta el jueves, este miércoles han sido trasladados en un furgón policial desde la cárcel de Picassent para el arranque del juicio, que ha comienza este miércoles con la elección del jurado y la lectura de los escritos de calificación e intervención de las partes. 

Maje, 'la viuda negra' de Patraix, de romance en romance también en prisión

La Fiscalía reclama provisionalmente 22 años de prisión para María Jesús y 18 para Salvador, acusado de ser el autor material del crimen. En el caso de ella, la pena solicitada es mayor al contemplarse la agravante de parentesco. Además de las penas de prisión, solicita indemnizaciones de 250.000 euros -a las que ambos procesados deben hacer frente solidariamente- para los padres y hermano del fallecido.

Será tras las 13 sesiones que está previsto que dure el juicio cuando el jurado popular, compuesto por cinco mujeres y cuatro hombres, decida si Maje y Salva son o no culpables de la muerte de Antonio Navarro, el marido de la acusada, que murió a cuchilladas en el garaje de su casa cuando se disponía a ir al trabajo como cada mañana.

Maje ha recurrido para su defensa al penalista Javier Boix y a la letrada Alicia Andújar, mientras que Salva estará representado por la abogada Julita Martínez.

Sus versiones han ido cambiando a lo largo del procedimiento. En el caso de Maje, cuando fue detenida confesó que participó en la planificación del crimen, pero dos días más tarde, ante el juez, se retractó y señaló que no fue así. Indicó que lo que dijo a los agentes fue porque estaba muy nerviosa y no había entendido la pregunta que se le había formulado. En el caso de Salva, ante la Policía afirmó que habían sido los dos, pero luego decidió asumir toda la responsabilidad y exculpar a Maje. Ante ello, se realizó un careo pero ninguno quiso declarar en ese momento.