Illa admite que no existía un comité de expertos para los cambios de fase

  • Illa confirma que hay 412 brotes activos en España pero con contagiados más leves.
  • La presión hospitalaria, asegura Illa, es baja.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados en Comisión de Sanidad y Consumo, para dar detalles sobre la evolución de la pandemia de coronavirus en España. En Madrid (España), a 11 de junio de 2020.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa.
Eduardo Parra - Europa Press
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados en Comisión de Sanidad y Consumo, para dar detalles sobre la evolución de la pandemia de coronavirus en España. En Madrid (España), a 11 de junio de 2020.

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, reconoció este jueves que el Gobierno no conformó un comité de expertos que le asesorase a la hora de autorizar los cambios de fase en la desescalada de las comunidades autónomas. Illa recordó que la "responsabilidad última" de esta decisión era suya, y afirmó que estaba basado en los "informes técnicos" elaborados por el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) que dirige Fernando Simón.

El ministro se vio obligado a ofrecer esta información tras las críticas que le dedicó la oposición en su comparecencia en la comisión de Sanidad del Congreso. Varias formaciones, entre ellas el PP, denunciaron que el Gobierno ha mentido después de que admitiera a preguntas del Defensor del Pueblo la inexistencia de dicho grupo. Los únicos comités que existieron, señaló Illa, fueron el "científico" que se reunía cada semana con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; y el que diseñó la desescalada.

"Para evaluar quién pasaba de fase la responsabilidad última era, como no puede ser de otra manera en un Estado democrático, del ministro de Sanidad", apuntó Illa. Eso implica que la decisión final de los cambios de fase fue política, aunque el ministro defendió los informes técnicos en los que se basaron estas decisiones y que se hicieron públicos una vez todas las comunidades habían abandonado la fase 0.

412 brotes activos, pero más leves

El titular de Sanidad, además, informó de que España tiene 412 brotes de coronavirus activos con 4.870 casos, pero la edad media de los contagiados ha bajado y muchos de los casos que se detectan son menos graves que los que se detectaron al inicio de la pandemia. Illa, por ello, aseguró que España no está "igual que en marzo".

Una de las diferencias fundamentales, señaló el ministro, es que las comunidades realizan ahora un número mayor de test, cerca de 50.000 diarios. Y eso implica que ahora se estén registrando un número mayor de casos entre personas jóvenes. "Ahora la media de edad de los contagiados es de 45 años" frente a los 63 de marzo y abril, y de hecho en las últimas cinco semanas esa media ha bajado "hasta los 40 años". 

Eso significa, concluyó Illa, que el 60% de los casos son asintomático y que "los casos sintomáticos son más leves", además de que "son pocos los que requieren ingreso" hospitalario. Según explicó el ministro, ahora mismo hay 209 personas ingresadas en las Unidades de Cuidados Intensivos, lo que implica que "la presión sobre el sistema sanitario es ahora mismo baja". Y "la cifra de fallecidos sigue siendo estable desde hace semanas, en la ultima semana han fallecido nueve personas", zanjó.

Las comunidades seguirán gestionando

De esta forma, Illa rechazó que exista por el momento la necesidad de volver a centralizar las competencias en el Estado a través del estado de alarma, y alabó la labor de las comunidades a la hora de controlar los brotes. "Las comunidades tienen instrumentos suficientes para actuar y a mi juicio lo están haciendo" de la manera correcta, sostuvo el ministro, que , están tomando medidas y cuentan las comunidades con todo el apoyo del gobierno y el ministerio de Sanidad

Illa explicó que la mayor parte de los contagios se deben al ámbito social -aunque un 24%, admitió, se producen en el laboral-, y pidió precaución en las reuniones de ocio en sitios cerrados y masificados. "Entendemos perfectamente que el confinamiento ha sido duro y que hay necesidad de relacionarse, pero no debemos de perder el respeto al virus. Siempre que no estemos con convivientes, hay que seguir las recomendaciones sanitarias generales: 1,5 metros de distancia, lavado de manos frecuente y uso de mascarilla", pidió.

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