El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este domingo que los colegios del país deberán prepararse para recibir a partir del próximo 22 de junio a "todos los alumnos de manera obligatoria y en condiciones normales" hasta el final del curso.

"A partir de mañana, tanto en Francia como en el extranjero, las guarderías, escuelas, universidades y escuelas preparatorias se prepararán para recibir el 22 de junio a todos los estudiantes de manera obligatoria y de acuerdo con las reglas de asistencia normal", ha ordenado Macron.

En un discurso a la nación, Macron ha comunicado que mañana, lunes, Francia "pasa la página del primer acto" de la lucha contra el coronavirus, por lo que "todo el territorio con la excepción de Mayotte y Guyana pasará a la zona verde", y que para ello hay que acelerar el retorno a la normalidad y reactivar la economía.

El presidente ha querido recalcar que la lucha contra la Covid-19 aún no ha terminado, por lo que "debemos continuar evitando las reuniones tanto como sea posible, porque sabemos que son los principales focos de propagación del virus", y ha añadido que "tendremos que vigilar la evolución de la pandemia para prepararnos en caso de que regrese con más fuerza".

Además, ha explicado que desde este lunes también abrirán con normalidad los bares y restaurantes de la región de París -hasta ahora sólo podían hacerlo las terrazas- y volverán a ser autorizadas la visitas a las residencias de ancianos. 

El presidente francés ha llamado a "aprender todas las lecciones" que nos ha dejado la pandemia de coronavirus para "fortalecer nuestras fortalezas" y corregir "nuestras debilidades", como la "dependencia de otros continentes para obtener ciertos productos, nuestra pesadez de organización" o las desigualdades sociales y territoriales. 

En cuanto a la economía, Macron ha asegurado que "nuestra prioridad es reconstruir una economía fuerte, ecológica, soberana y unida", para lo que se movilizarán 500 mil millones de euros "para los trabajadores, los empresarios y también para los más vulnerables".

"No financiaremos estos gastos aumentando los impuestos", ha subrayado, apuntando que "la única respuesta es construir un modelo económico sostenible más fuerte, para trabajar y producir más para no depender de otros".