La grave crisis sanitaria provocada por la pandemia de coronavirus ha dejado en una situación muy delicada a miles de familias en España. Algunas no reciben ningún ingreso y no saben qué hacer para llegar a fin de mes, por lo que se ven obligadas a recurrir a la solidaridad de vecinos y comerciantes para poder comer.

Muchos de los barrios obreros de las grandes metrópolis españolas que ofrecen su ayuda a través de asociaciones comienzan a registrar en sus calles larguísimas colas de personas pobres que esperan durante horas para conseguir algo de comida gratis.

Vecinos y comerciantes del Barrio del Pilar en Madrid son las personas que ofrecen su ayuda en este escenario de desamparo en el que se han quedado algunos como una asistente, que explica que "no me llega para comer. Tenía en trámites la jubilación por invalidez pero con todo esto se ha quedado paralizado y entonces tengo que pedir para comer".

"Necesitan comida. Lo que estamos haciendo es recoger alimentos para ayudar. Están colaborando todas las asociaciones, gente del barrio y comercios que vienen y traen comida", explica una de las voluntarias.

Otra opción para estas familias será el Ingreso Vital Mínimo, una medida que será aprobada en el próximo Consejo de Ministros. Este ingreso oscilará entre los 461 y algo menos de 1.100 euros, según ha adelantado este domingo José Luis Escrivá, ministro de Inclusión, Seguridad Social e Inmigraciones.