Las grandes superficies se preparan para la reapertura de sus puertas en la desescalada tras la pandemia del coronavirus, y muchas de ellas lo harán con cambios. Es el caso del gigante sueco del mueble Ikea, que ya prevé abrir 19 tiendas en Reino Unido el 1 de junio, pero con novedades.

Según The Sun, la cadena sueca va a poner en marcha un estricto control del distanciamiento social. Por ello, no permitirá el acceso de familias enteras, sino que sólo podrá entrar un niño acompañado por un adulto. 

Las áreas de juego permanecerán cerradas, así como el restaurante-cafetería de las tiendas. En cambio, sí que estará abierto el supermercado sueco, así que los fans de las albóndigas suecas podrán llevárselas, al menos para disfrutarlas en casa.

El aforo estará limitado y la tienda recomienda a los clientes que vayan con las ideas muy claras sobre lo que quieren comprar. 

En la tienda habrá gel hidroalcohólico disponible y se extremarán medidas de limpieza en las bolsas, los carros, los aseos y las pantallas. 

No se podrá pagar en efectivo y a aquellos clientes que quieran hacer devoluciones, Ikea les pide que intenten realizarlas lo más tarde posible.