"Las sociedades catalana, vasca y gallega rechazan mayoritariamente la figura de una institución anacrónica heredera del franquismo" que carece de "legitimidad". Así justificaron ERC, JxCat, EH Bildu, BNG y la CUP su rechazo a asistir al discurso del rey que presidió este lunes la solemne apertura de la legislatura en el Congreso. 

Una hora antes de la intervención de Felipe VI, que tuvo lugar pasadas las 12, los principales partidos independentistas leyeron un manifiesto conjunto en el que, bajo el título No tenemos rey. Democracia, libertad, repúblicas rechazaron que el monarca sea "un interlocutor válido" en su "camino democrático hacia la libertad". "Ni tiene la legitimidad de nuestros pueblos, ni le reconocemos ninguna función política", sostuvieron. 

Las cinco formaciones secesionistas denunciaron que, a su juicio, la monarquía niega "los derechos civiles, políticos y nacionales" que asistirían a las "ciudadanías y pueblos" vasco, catalán y gallego. Y acusaron a Felipe VI de "intentar imponer proyectos y valores antidemocráticos, como quedó demostrado en el discurso autoritario pronunciado el 3 de octubre", dos días después del referéndum ilegal en Cataluña.

"Una democracia real solo será posible desde la ruptura con la herencia, las bases y valores que representan el rey y su figura", plantearon igualmente las formaciones independentistas, que aseguraron que Felipe VI "y la monarquía deben dejar de ejercer su tutela sobre la ciudadanía y los gobiernos y parlamentos de la voluntad popular emanan".

"Solo así se podrá dar cauce a soluciones basadas en el respeto a la voluntad popular, la libertad y la democracia", apunta el manifiesto, que insiste en que la monarquía "no responde a los valores republicanos de libertad, igualdad y democracia que tanto los ciudadanos de nuestros pueblos como las mayorías sociales del Estado anhelan".