Los reyes han presidido este lunes la Pascua Militar en el Palacio Real con la presencia del jefe del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, que este martes será investido por el Congreso en segunda votación si no hay sorpresa.

Es la primera ocasión en la que esta ceremonia coincide con la celebración de un debate de investidura, en cuya primera votación, celebrada este domingo, Sánchez no logró la mayoría absoluta exigida.

Al acto en el Palacio Real, además de los reyes y Sánchez, han asistido la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y los mandos de los tres Ejércitos y de la Guardia Civil. 

Como es habitual en esta ceremonia, el discurso del monarca ha estado centrado en hablar del papel de los militares y su compromiso con los valores constitucionales, así como del ámbito de la seguridad. Por ello, no ha habido ninguna mención a la situación política. El jefe del Estado se ha centrado en destacar  "la lealtad y la constante y generosa entrega" al servicio de la ciudadanía tanto de las Fuerzas Armadas como de la Guardia Civil, así como su compromiso "con España y con la Constitución". 

Antes que el rey ha intervenido la ministra de Defensa, que ha rendido homenaje a todas las tropas desplegadas en el extranjero, pero ha hecho especial referencia a los efectivos en Irak, que suman unos 550, después de que este domingo el Parlamento de ese país pidiera poner fin a la presencia de tropas extranjeras.

La Pascua Militar es una conmemoración que instauró Carlos III después de que España recuperara la localidad menorquina de Mahón, de manos de los ingleses, el 6 de enero de 1782.