Hasta el último momento, no se sabrá con certeza si las condiciones meteorológicas permitirán este jueves hacer el traslado de los restos de Franco en helicóptero desde el Valle los  Caídos, donde serán exhumados, hasta el lugar de la reinhumación, el cementerio de Mingorrubio, en El Pardo. No obstante, un día antes, con el cielo nublado y una ligera llovizna, el artefacto sí ha podido volar durante los últimos preparativos este miércoles en presencia de los responsables de todo el dispositivo.

Al menos uno de los dos helicópteros Superpuma del Grupo 45 del Ejército del Aire con los que cuenta el Gobierno para la exhumación de los restos del dictador ya se encuentran en el Valle de los Caídos, tal y como ha mostrado un vídeo que ha difundido Moncloa este miércoles. En él también aparecían aparcados a pie de la escalinata que hay a la salida de la basílica dos coches fúnebres, puesto que, como en el caso de los dos helicópteros previstos, el Gobierno también ha desplazado dos vehículos.

Según el plan trazado, los nietos y biznietos sacarán el féretro con los restos de Franco a hombros de la basílica y recorrerán así unos 300 metros, incluida la escalinata. Después, lo depositarán en un coche fúnebre que, si el tiempo lo permite, trasladará el féretro a uno de los dos helicópteros, situados en uno de los dos aparcamientos a ambos lados de la basílica.

En principio, los responsables del dispositivo no temían tanto la lluvia como el viento o la niebla, que podrían impedir el traslado por aire, que duraría unos 10 o 15 minutos. Si no es posible, se emprenderá el traslado en coche, el medio que utilizarán los familiares del dictador, que tardará unos 30-40 minutos en recorrer la distancia entre el Valle de los Caídos y el cementerio de Mingorrubio.

Hasta última hora no podrá asegurarse del todo el medio de transporte que se empleará finalmente, pero este miércoles, con una leve lluvia, los pilotos sí han podido sobrevolar el Valle de los Caídos, como se ve en el vídeo.

El secretario general de la Presidencia del Gobierno, Félix Bolaños, y el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Oliver, han examinado sobre el terreno los últimos preparativos para la exhumación, este jueves a partir de las 10.30h, de los restos de Franco. También han estado presentes otros miembros de los ministerios de Presidencia y del de Justicia, puesto que la ministra, Dolores Delgado, tendrá un papel destacado en el procedimiento.

Como notaria mayor del Reino, corresponderá a Delgado levantar acta de la exhumación y de la reinhumación, de manera que será de las pocas personas que podrá acceder a los espacios más restringidos durante el procedimiento. Primero, a la carpa que se desplegará sobre la tumba de Franco dentro de la basílica, a la que también entrarán los operarios de la funeraria, un forense y dos miembros de la familia Franco, de los 22 allegados que presenciarán la exhumación, pero la mayoría de ellos dentro de la basílica y fuera de la carpa. También le corresponderá a la ministra viajar al helicóptero en que traslade los restos a El Pardo, donde también irá uno de los nietos del dictador, Francis Franco.

El Gobierno calcula que, si todo va según lo previsto, la exhumación podría estar hecha en una hora, de manera que en torno a las 11.30h la comitiva de familiares y el vehículo en el que viajen los restos podrían estar saliendo del Valle de los Caídos hasta Mingorrubio. En estos dos puntos, ya es muy notable la presencia de medios de comunicación y, aunque Delegación del Gobierno ya ha denegado dos concentraciones franquistas, los responsables del dispositivo no descartan que este jueves haya concentraciones de uno y otro signo, de defensores y detractores del dictador.

El Valle de los Caídos permanece cerrado al público desde el 11 de octubre, el día en que el Gobierno anunció que la exhumación se llevaría a cabo antes de la fecha límite del 25 de octubre. Aunque no preveía apurarlo tanto, al final se hará tan solo un día antes.

Una vez que se extraigan los restos de Franco, será necesario reemplazar la lápida bajo la que hasta ahora ha estado su tumba por un enlosado igual al del altar mayor de la basílica. Es por esto que el Valle no volverá a abrirse a las visitas de inmediato, el viernes mismo, sino que no lo hará hasta la semana que viene, alrededor del martes, 29 de octubre.