Horas después de que los funcionarios se manifestaran masivamente para protestar por los recortes aprobados por el Gobierno, los gritos de descontento han regresado a la calle en distintas protestas en varias ciudades españolas.

Miles de funcionarios han tomado la Gran Vía madrileña y han provocado el cortes en el eje que discurre entre Callao, Gran Vía, su prolongación a Alcalá y la plaza de Cibeles.

Allí se han unido al 'cortejo fúnebre' convocado por los empleados municipales del Ayuntamiento de Madrid que tenían prevista una marcha este lunes. Esta manifestación ha sido aprobada por la Delegación de Gobierno y discurrirá hasta el número 30 de la calle Alcalá. Se espera que concluya a las 13 horas.

Los empleados del Ayuntamiento han simulado un funeral en el que han enterrado metafóricamente sus derechos. En el ataúd que portaban se podía leer "RIP derechos laborales" y "RIP servicios públicos".

Con gritos de "manos arriba, esto es un atraco", decenas de personas se han dirigido hacia el Congreso de los Diputados ante la atenta mirada de los antidisturbios. "Somos como cualquier otro ciudadano, y nos están machacando", ha señalado uno de los manifestantes.

En las protestas en los aledaños del Congreso, que aparecía blindado, se han vivido momentos de tensión cuando algunos manifestantes han golpeado las vallas mientras gritaban consignas pidiendo la dimisión del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Según fuentes del Ayuntamiento de Madrid, los cortes han sido intermitentes en el Paseo de la Castellana, a la altura de Plaza de Castilla, de Nuevos Ministerios y de la Plaza de San Juan de la Cruz, coincidiendo con la ubicación, entre otros, de los juzgados y de varios ministerios como el de Fomento y Agricultura.

También se han producido cortes en la calle O'Donnell, con la presencia de médicos y enfermeras del Hospital Gregorio Marañón y a las puertas del Ministerio de Hacienda.

Varios centenares de trabajadores de los hospitales Gregorio Marañón y Santa Cristina, del centro de salud de O'Donnell y de la Consejería de Asuntos Sociales han protagonizado dos concentraciones con cortes de tráfico.

La primera y más numerosa de ellas, y que según los participantes ha sido "espontánea", ha tenido lugar entre las 11.00 y las 11.30 horas en la calle O'Donnell, donde han confluido, a la hora del bocadillo, trabajadores de cuatro centros cercanos: el Hospital Infantil Gregorio Marañón, la maternidad Santa Cristina, el centro de salud O'Donnell y funcionarios de la Consejería.

Varios centenares de empleados públicos han cortado el tráfico en ambos sentidos en la calle O'Donnell, "dejando paso solamente a las ambulancias", según ha señalado un portavoz de los empleados, y sin que se produjeran incidentes mayores.

A continuación, a las 12.00 horas los empleados del Hospital Gregorio Marañón habían convocado una segunda concentración, en la que han participado unas 300 empleados del hospital de adultos que han cortado el tráfico en Doctor Esquerdo, en la esquina con Ibiza.

Portaban una gran pancarta y, coreando cánticos contra los recortes del Gobierno y en defensa de la sanidad pública, también han cortado el tráfico en ambos sentidos en Doctor Esquerdo sin que se produjeran incidentes importantes, "salvo con algunos motociclista que querían colarse detrás de las ambulancias", ha explicado la misma fuente.

Este portavoz ha asegurado que la concentración no ha sido convocada por el Comité de empresa del hospital, aunque cuenta con su connivencia y que podría repetirse el martes, al menos la de los cuatro centros de la calle O'Donnell.

Estas protestas tienen su eco en el resto de España donde también para este lunes hay convocadas concentraciones y marchas contra las medidas anunciadas por el Gobierno, que les quita una paga extra de Navidad y les reduce los días libres.

Más de 3.000 de empleados públicos andaluces se han concentrado este lunes convocados por el sindicato CSIF-A en todas las capitales de provincia andaluzas para protestar contra los "recortes" aprobados por el Gobierno de Mariano Rajoy que afectan a este sector, así como contra los establecidos en el Plan de Equilibrio Económico de la Junta de Andalucía.

En Sevilla, varios centenares de personas, casi seiscientas personas, según el sindicato de funcionarios CSIF, se han concentrado frente a los Juzgados del Prado de San Sebastián. También de forma pacífica, los manifestantes marcharon hasta la sede del Partido Popular de Andalucía.

En otra de las protestas convocadas para este lunes en Madrid, un centenar de funcionarios, la mayoría trabajadores del Ministerio de Justicia, han vuelto a concentrase ante la sede del Partido Popular en la madrileña calle de Génova para protestar por los recortes.

La protesta se ha prolongado alrededor de media hora frente a la puerta principal de la sede popular, protegida por varios policías nacionales.

"Que sea un diputado el próximo parado" o "No a los recortes, Rajoy dimisión", han sido algunos de los eslóganes que han coreado los funcionarios mientras hacían sonar trompetas y silbatos.

Cientos de trabajadores del Hospital Miguel Servet de Zaragoza han cortado el tráfico a los vehículos y al tranvía durante una protesta ante las puertas del centro sanitario.

Con batas blancas y camisetas con el lema "Por la sanidad pública y la calidad", los trabajadores portaban pancartas que decían "No a los recortes" y colocaron otra en la puerta del servicio de urgencias, con la frase "OJO señores del PP, la salud no se vende".

Los funcionarios fueron protagonistas este domingo y el lunes en las redes sociales, especialmente de Twitter, después de que una etiqueta #graciasfuncionarios se convirtiera en uno de los temas del día con las aportaciones de miles de ciudadanos y sus agradecimientos a los empleados públicos.

"#Graciasfuncionarios por educar, enseñar, curar, detener, ayudar, limpiar, conducir, arreglar, servir" es uno de los tuits que se pudo leer sobre este asunto.

También #FuncionarioDesobedece se ha convertido en trending topic y hace un llamamiento, entre otras cosas, a no participar en los desahucios y a garantizar el acceso a la sanidad universal a las personas sin papeles de residencia.