'Viernes negro o de luto' para miles de funcionarios de toda España, que han vuelto a salir a las calles para protestar contra los recortes anunciados este miércoles por Mariano Rajoy y que ellos consideran un "atraco", ya que se quedan sin la paga extra de Navidad y varios de los días de libre disponibiblidad, también llamados moscosos.

Las federaciones de servicios públicos de CC OO y UGT y el sindicato de funcionarios CSI-F han convocado paros parciales este viernes en todos los centros de trabajo con empleados públicos a nivel estatal. Estos tres sindicatos han dirigido un escrito a USO, CGT, los sindicatos nacionalistas (ELA, LAB, CIG), sindicatos de Correos, de Administración y Justicia, de enseñanza, de sanidad y de la Guardia Civil, entre otros, para organizar una reunión en la que se concreten las medidas de presión ante estas medidas.

Los sindicatos barajan medidas jurídicas, como recursos de inconstitucionalidad, intervenciones parlamentarias a través de los grupos que les escuchen y medidas de fuerza como paros parciales y paros generales "si fuera necesario". De hecho, no descartan convocar una huelga general en el sector público cuando finalice el periodo vacacional.

El secretario general de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, Enrique Fossoul, ha denunciado que los "recortes" se han impuesto con absoluto desprecio a la negociación colectiva y que, además, son el "chocolate del loro" comparados con la deuda española. Y el vicepresidente nacional de CSI-F, Pepe Navarro, ha asegurado que este será un viernes "dolorosísimo" porque el Consejo de Ministros aprobará unas medidas que cree "injustas" e ineficaces.

En la capital española, los empleados públicos que trabajan en los distintos ministerios ubicados en Nuevos Ministerios han cortado por segundo día consecutivo parte de los carriles centrales del Paseo de la Castellana. Convocados a concentrarse a las 11.00 horas a las puertas de todos los edificios de las administraciones públicas, en el caso de Nuevos Ministerios, unos 150 trabajadores han estado durante unos minutos cortando los carriles centrales con banderas y consignas en contra de los recortes.

Además, varios cientos de funcionarios también se han concentrado frente a la sede de la Comunidad de Madrid, en la Puerta del Sol, con pancartas con los lemas No y Esto es un atraco. Allí trabajadores de los departamentos de Hacienda, Defensa, Seguridad Social y Economía han silbado y pitado contra los recortes.

La Carrera de San Jerónimo, donde se encuentra el Congreso de los Diputados, ha permanecido cerrada al tránsito de ciudadanos por la policía. Sin embargo, los trabajadores del Congreso de los Diputados han salido cerca de las 12.00 horas y se han concentrado frente al acceso principal del edificio.

Incluso en el Palacio de la Moncloa, los trabajadores públicos han recorrido todos los edificios del complejo silbando y portando pancartas. Allí han recibido con una gran pitada a los ministros que llegaban a celebrar el Consejo de Ministros tras reunirse con el Rey. También en la sede nacional del PP, en la calle Génova, un grupo numeroso de funcionarios protesta contra los ajustes del Gobierno popular.

En Valencia, funcionarios del sector de la justicia se han concentrado frente a la Ciudad de la Justicia para protestar al grito de Manos arriba, esto es un atraco.  Representantes de los sindicatos CSIF, CCOO e Intersindical se han concentrado con banderas y pancartas con lemas como No al colapso judicial, Por una mejora de la justicia o En defensa de los servicios públicos. No a los recortes en justicia, y han coreado consignas contra los recortes.

El presidente autonómico de CSIF sector justicia, Francisco José Cervera, ha explicado a los periodistas que ésta es la primera de una serie de reivindicaciones que se van a llevar a cabo en todo el país, como "manifestaciones multitudinarias de media hora de todos los funcionarios de España". "Una vez más se demuestra que los políticos, sean de un bando o de otro, cuando les aprietan el cinturón siempre nos aprietan a nosotros", ha criticado Cervera, quien ha lamentado que de un día para otro, quienes decían que no iban a "tocar los sueldos" de los funcionarios, acometan "una bajada de sueldo superior a la que hubo en 2010" con el Gobierno de Zapatero.

El dirigente de CSIF ha manifestado que "lo que no puede ser es que la crisis" la paguen "siempre los mismos" y quienes no la han provocado, y ha considerado que el funcionario debe hacer ver que no está " para cobrar, sino para dar un servicio de calidad, y este se da desde la profesionalidad".

La protesta, que ha sido secundada por unas doscientas personas, se ha producido mientras en el interior de la Ciudad de la Justicia el titular del juzgado de Instrucción número 3 de Palma de Mallorca ha iniciado la toma de declaraciones a varios testigos por el caso Noos, el primero de ellos el exvicepresidente del Consell Víctor Campos.

Los funcionarios del ayuntamiento de Zaragoza se han concentrado a las puertas del consistorio. Acompañados de varios concejales de PSOE, CHA e IU, los asistentes a la manifestación estaban ataviados con camisetas negras, color que ha elegido este colectivo para expresar su indignación y "luto por lo que está ocurriendo con los servicios públicos".

Según ha expresado Ignacio Aguar, secretario general de UGT en el ayuntamiento de Zaragoza, las medidas adoptadas por Rajoy son "equivocadas e injustas" y servirán para que la recesión económica se agudice y aumente el desempleo. Asimismo, ha criticado que sean siempre los mismos los perjudicados: "ya sabemos quién está pagando la factura del rescate, los sectores más débiles de la sociedad", ha añadido.

En cuanto a los empleados públicos, Aguar ha indicado que han registrado una pérdida salarial de "en torno a 20 puntos, que dentro de dos años será de 30 puntos", y ha apuntado que el rescate fue menos doloroso para los funcionarios de Portugal e Irlanda que para los españoles.  Ha asegurado que están dispuestos a negociar lo que sea preciso, pero ha advertido de que la "línea roja" es mantener los puestos de trabajo: "nosotros vamos a luchar por que no se despida a ningún trabajador del ayuntamiento", ha dicho.

Además, los trabajadores de la Universidad de Zaragoza y de los hospitales Clínico y Miguel Servet han cortado distintas vías céntricas de la capital aragonesa. Vestidos con batas blancas los sanitarios han cortado la avenida San Juan Bosco a la altura del Hospital Clínico, así como el paseo Isabel La Católica y la plaza del Emperador Carlos V, en el entorno del Hospital Miguel Servet, mientras que el colectivo universitario ha bloqueado la plaza de San Francisco.

Los sindicatos andaluces de empleados públicos han convocado una jornada de protesta de "brazos caídos" o "huelga de celo" en las administraciones públicas y han pedido a la Junta que "se negocie partiendo de cero" el plan de ajuste aprobado por el Gobierno, para "no perjudicar doblemente" a los empleados públicos.

De esta forma, algunos sindicatos piden que "la Junta no toque ninguna de las pagas extras y deje en suspenso ese recorte", toda vez que "el Gobierno va a suprimir la paga extra de Navidad, por lo que el recorte aprobado por la Junta no tendría sentido y agravaría más nuestra situación". También harán concentraciones "que se prolongarán durante toda la jornada laboral" y con lo que pretenden "visualizar nuestro malestar y hacer ver qué ocurre cuando los empleados públicos no trabajan".  

UGT ha anunciado que prevé acudir el dia 15 a las puertas del congreso del PP-A en Granada, donde prevén que acuda el propio Rajoy, para "pedirle explicaciones sobre por qué nos está robando nuestro dinero". Fuentes de CSIF lamentan que se trate a los empleados públicos como "la caja de ahorros de este gobierno, donde cada vez que necesitan dinero meten la mano en empleo público y se llevan el dinero a su antojo". Este sindicato considera que "llueve sobre mojado" en el "recorte" a empleados públicos" y considera que "no se valora económicamente los efectos de la reducción salarial a esos más de dos millones de empleados, que traerá una reducción del consumo".

Más de un millar de empleados públicos del Principado de Asturias se han manifestado por las calles de Oviedo vestidos de negro. Convocados a través de las redes sociales y respondiendo a una iniciativa impulsada por empleados públicos de Málaga a través de la página web noalafuncionariofobia.blogspot.com.es, los trabajadores se han concentrado ante el Edificio Administrativo de Servicios Múltiples (EASMU), en Oviedo.

Desde el EASMU, los empleados públicos han recorrido las calles del centro de Oviedo en una manifestación espontánea. Tras la pancarta Nos están dejando en pelotas, los manifestantes han realizado un recorrido hasta llegar a la Delegación del Gobierno en Asturias y después han cortado varias calles del centro de la ciudad en una movilización que ha durado cerca de una hora. Con gritos como El próximo parado que sea diputado y Manos arriba esto es una atraco, los cientos de manifestantes han protestado contra las medidas de ajuste.

Contestando a esta llamada reivindicativa, trabajadores del Ministerio de Hacienda, en la sede de Oviedo, al igual que en otras muchas de la región, se han concentrado durante media hora cortando el tráfico. Respondiendo también a esta convocatoria denominada "Viernes negros" los trabajadores de la sanidad de Asturias se han concentrado en las escaleras del Centro Materno Infantil del Hospital Universitario Central de Asturias.

Trabajadores de varios organismos públicos se han concentrado en varios puntos de Barcelona. Los manifestantes exigen al ejecutivo de Mas que cumpla los compromisos de la vicepresidenta del Gobierno en el sentido de que a los funcionarios "no les recortarán por duplicado". Los funcionarios han afirmado que el recorte de la paga de Navidad supone una situación de crispación "absoluta" y de rotura de las reglas del juego.

En este sentido, los funcionarios han apuntado que esperan que el gobierno de Mas actúe con "competencias propias" y que no adopte  las actitudes "chulescas" que han mostrado algunos diputados de Madrid.