En España, es posible vivir en una ciudad que tiene menos habitantes que un bloque de edificios. Es lo que ocurre en Frías, un municipio de la provincia de Burgos que ostenta el título de ser la ciudad más pequeña de España. Con solo 267 habitantes, según el último censo publicado en el Instituto Nacional de Estadística (INE), Frías es una joya histórica y cultural que merece la pena conocer.
La capital del Valle de Tobalina, en la comarca de Las Merindades y a unos 80 kilómetros de Burgos capital, obtuvo el estatus de ciudad en el siglo XV, y ha capturado la atención incluso de National Geographic, que la destacó como uno de los lugares más pintorescos de España.
Una ciudad con mucha historia
Frías, estratégicamente situada para cruzar el río Ebro desde la época romana, tiene una rica historia que se remonta al año 867 durante la repoblación posterior a la conquista musulmana. En el siglo XI, el conde Sancho García adquiere la ciudad, que se integra en el reino de Pamplona Nájera. En 1202, el rey Alfonso VIII le otorga el Fuero de Logroño, impulsando su desarrollo económico y dándole independencia. Pasa a depender de Castilla y se expande por el Valle de Tobalina.
En el siglo XIV, se construye una torre sobre el puente para mejorar la recaudación. En 1435, el rey Juan II de Castilla le concede el título de ciudad en un intercambio con el conde de Haro. Sin embargo, la población de Frías se niega a aceptar al nuevo señor, lo que lleva a un enfrentamiento y asedio de la plaza antes de acatar las normas del conde.
Su casco histórico está declarado Conjunto Histórico Artístico, y alberga monumentos impresionantes como el castillo de los Velasco, la impresionante iglesia de San Vicente, el puente románico-medieval o las casas colgadas, que se apoyan sobre la roca del cerro de La Muela y sobresalen del precipicio.
Pero Frías no solo destaca por su historia, sino también por su belleza y su ambiente. Sus calles empedradas y sus casas de piedra invitan a pasear y a disfrutar del paisaje. Sus habitantes mantienen vivas las tradiciones y las fiestas populares. Además, Frías forma parte de la red de Los Pueblos más Bonitos de España, una asociación que reconoce a los municipios que cuidan su patrimonio y su entorno.
Un destino ideal por su gastronomía
Frías es también un destino ideal para los amantes de la naturaleza y la gastronomía. Su ubicación le permite ofrecer una gran variedad de actividades al aire libre, como senderismo, ciclismo, pesca o piragüismo. Su cocina es típica de Castilla y León y el municipio cuenta con una importante explotación hortofrutícola con productos de exquisita calidad.
Para ampliar información sobre Frías y conocer todas las opciones de turismo que ofrece la singular ciudad, se puede visitar la web oficial de Turismo de Burgos haciendo clic aquí.
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