Carlo Ancelotti ha tomado la decisión de convocar esta semana para el partido de Liga del Real Madrid ante el Alavés en Mendizorroza a uno de los canteranos blancos que fueron detenidos en septiembre por la grabación y difusión de un vídeo sexual de una menor de edad sin su consentimiento, y que de hecho están ya imputados y bajo investigación.

Se trata del defensa central Raúl Asencio, el único de los cuatro investigados por un presunto delito de revelación de secretos y pornografía infantil que pertenece a la plantilla del Castilla (el resto forman parte del juvenil C), y que acudirá a la llamada del primer equipo para ayudar en una demarcación en la que el club blanco anda escaso de efectivos por las lesiones.

El joven de 20 años, no obstante, está citado para declarar como imputado este próximo viernes a las 10 horas ante el Juzgado de Instrucción Número 3 de San Bartolomé de Tirajana (Canarias) junto con otros dos investigados, Ferran Ruiz Martí y Juan Rodríguez Lima, y deberá viajar con la expedición madridista teniendo en cuenta su comparecencia telemática por videoconferencia en el Juzgado de Instrucción número 10 de Madrid.

Todos ellos fueron detenidos el pasado 14 de septiembre en Valdebebas junto a otro de sus compañeros, Andrés García Alemán, que admitió su participación cuando declaró como testigo en la Guardia Civil. Tras los interrogatorios, la Benemérita concluyó que la denunciante, de 16 años, se encontraba con dos amigas de 17 y 18 años en un local de playa que se llama Amadores Beach Club, en el municipio de Puerto Rico (Las Palmas), cuando sucedió todo. 

Corría el 15 de junio, y se encontraban acompañadas por un grupo de chicos integrado por esos jugadores de la 'Fábrica' cuando decidieron entrar con ellos a un reservado apartado y tapado por unas cortinas para salvaguardar su intimidad. Todos salvo Raúl Asencio, que se encontraba con otra chica en la zona común del local, a la vista de todo el mundo, y no participó de lo sucedido en el reservado.

Allí dentro los jóvenes mantuvieron relaciones sexuales consentidas, pero la denunciante descubrió que Ferran Ruiz y Juan Rodríguez se habían estado pasando un móvil entre ellos mientras las grababan. Las chicas les increparon al terminar por haberlas grabado sin permiso, y pensaron que todo había acabado cuando, tras una discusión de varios minutos, los futbolistas les mostraron su móvil para demostrar que habían borrado los vídeos.

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Sin embargo, semanas después, fue el propio Raúl Asencio quien destapó sin querer la existencia de los vídeos. Natural de Gran Canaria, el defensor merengue regresó a casa en verano y le contó a otro amigo lo sucedido en el club de playa apenas un mes antes. Para demostrárselo, pidió el vídeo que sus compañeros aún conservaban, pero la denunciante se enteró por tener relación directa con el amigo de Asencio.

Después de ser detenidos e imputados, la Guardia Civil requisó sus teléfonos móviles para evitar la destrucción de pruebas, como después sugerirían las denunciantes, y tomó el testimonio a finales de octubre a las dos víctimas, así como a una testigo, antes de la primera citación a los jugadores para declarar en sede judicial, que tuvo lugar el 8 de noviembre. 

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Una de las víctimas, además, afirmó al juez Julio Wood que otro futbolista de las categorías inferiores del Real Madrid, ajeno a la investigación, le dijo que el vídeo sexual había circulado por la ciudad deportiva de Valdebebas: "Me dijo que eso había pasado por los vestuarios de la cantera". Ese mismo día también compareció la persona a la que Asencio le mostró el vídeo, y confirmó que Asencio no lo tenía en ese momento, por lo que tuvo que pedir a alguien que se lo mandase. 

Mientras tanto, el Real Madrid guarda silencio y se remite al comunicado que emitió en su día, informando de que había tenido conocimiento de estos hechos y de que cuando el club tuviese información detallada de los mismos, adoptaría unas "medidas oportunas" que, lejos de haberse hecho notar, han desembocado en la convocatoria de uno de los imputados con el primer equipo.