En la 17ª etapa de la Vuelta a España de este miércoles, con final en el alto del Angliru, presenciamos como se desataron las hostilidades entre el trío magnífico del Jumbo-Visma. Jonas Vingegaard y Primoz Roglic arruinaron la fiesta de cumpleaños a Sepp Kuss, líder de la Vuelta, con un ataque a falta de dos kilómetros que desveló que no hay ninguna jerarquía en el equipo holandés y que ganará el más fuerte de los tres. El Jumbo sigue siendo muy superior al resto y volvió a colocar en el Angliru a sus tres 'tenores' en las tres primeras posiciones de la etapa, tal y como hizo en Tourmalet.

Kuss ha sido un ciclista muy importante en los éxitos anteriores logrados por sus dos compañeros de equipo (Vingegaard y Roglic), siendo relevante en las tres Vueltas y el Giro del esloveno, además, de serlo en los dos Tours del danés. Ha sido un gran corredor bajo la sombra de dos grandes estrellas, aunque en la última gran vuelta de la temporada ha demostrado su valía como corredor de carreras de tres semanas.

El Jumbo-Visma no se ha decantado en esta Vuelta por un líder claro. En un inicio, la cabeza del equipo en la ronda española iba a ser el ciclista esloveno, pero más tarde se unió a la carrera el ciclista danés y, posteriormente, les sorprendió Sepp Kuss con su gran rendimiento en la Vuelta a España como tercer líder en discordia. Por otro lado, el equipo holandés desveló que sus corredores tenían vía libre y Marc Reef, jefe del Jumbo-Visma, declaró que han tomado la decisión de que "gane el más fuerte".

Muchos ciclistas retirados como Purito Rodriguez, Alberto Contador, Jens Voigt, David Millar se han posicionado en favor del ciclista americano, considerando inapropiado que le descolgaran en la subida al Angliru. 

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Ayudas clave a Roglic

El ciclista americano ha sido uno de los grandes gregarios de lujo de Roglic, desde aquella derrota en la última etapa que fue el primer Tour de Francia de Pogacar hasta el Giro de Italia 2023. Hace tres años, el guion de la película fue al revés en la misma ascensión, el Angliru, cuando Kuss tenía más fuerzas que su compañero Primoz Roglic, que era líder de la Vuelta, y el ciclista de Colorado decidió ayudarle para minimizar la ventaja con Carapaz, inmediato perseguidor. La ayuda que recibió por parte del de Durango fue clave en su última victoria final en la Vueta a España en 2020, porque la ganó por la reducida ventaja de 24 segundo.

Además, el estadounidense le protegió como nadie en la alta montaña de su último triunfo en el Giro de Italia, que ganó en la crono final, y donde partía como favorito frente a Geraint Thomas, que vestía el rosa. En esta ocasión, pese a todo, el ciclista esloveno le hizo una jugarreta a Sepp, maillot rojo, en el coloso asturiano.

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El apoyo a Jonas Vingegaard

Vingegaard ha conseguido ganar sus dos Tour de Francia, donde ha derrotado a Pogacar, gracias a la ayuda de Sepp Kuss en la alta montaña. Aunque el corredor danés estos últimos días ha declarado que le "gustaría que Sepp Kuss gane la Vuelta", estas palabras se contradicen con lo sucedido en la carretera, pues Jonas fue el que desato las hostilidades en la subida a Bejes, cuando ataco al principio de puerto, sacándole 1 minuto y 5 segundos al ciclista de colorado, actual líder de la Vuelta.  Este pasado miércoles el vigente campeón del Tour de Francia dijo en línea de meta después de unirse a la 'puñalada' de Roglic que está "feliz de que Sepp esté con la camiseta roja".

El Jumbo-Visma quiere intentar algo histórico que es ganar las tres grandes vueltas en un mismo año, algo que ningún equipo ha conseguido. Aunque todavía puede ser más histórico si las acaban ganando con un corredor diferente, algo que reflejaría su dominio y sería casi imposible de igualar.