La unidad contra el blanqueo de capitales de los Mossos d'Esquadra estuvieron a principios de semana en el Camp Nou como parte de un registro para recabar documentos y contratos con la empresa I3 Ventures, que protagonizó el escándalo de las cuentas falsas desde las que se criticaba a la oposición y hasta a jugadores del equipo. Esta empresa, realmente, se encargaba de monitorear las redes sociales del club.
La Vanguardia informa, según "fuentes judiciales", que fue la juez de instrucción número 13 de Barcelona quien solicitó el registro y la búsqueda de la documentación. La misma magistrada, fue la que admitió a trámite la denuncia de ocho socios, del grupo Dignitat Blaugrana.
Esta denuncia tiene como fin averiguar e investigar cualquier irregularidad que se pudiera haber producido, más que acusar a alguna persona en concreto de manera previa. La denuncia cobra más importancia tras las palabras del exvicepresidente Emili Rousaud en las que aseguró que "alguien había metido mano en la caja".
Los Mossos requirieron información sobre los contratos, el precio pagado y los controles y filtros con los que funciona el club. Las autoridades investigan posibles delitos de administración desleal, si se ha pagado un precio exagerado fuera del mercado, además de otro de corrupción si alguno de los directivos hubiese recibido una comisión.
Por el momento, no hay ningún imputado y el club también está mantenido al margen, pero no se descarta la posibilidad de que más de un directivo quede involucrado ya sea como testigo o acusado.
Por su parte, la empresa I3 Ventures también ha ofrecido a la juez la documentación que le corresponde y se ha reclamado en relación a su vinculación con el FC Barcelona.
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