Luis Enrique y Robert Moreno habían sido uña y carne hasta ahora. El asturiano conoció al catalán en su etapa en el Barça B y desde entonces se lo fue llevando a todos sus equipos, hasta que le incorporó a su staff en la Selección española. Todo iba a pedir de boca, hasta el momento en el que Moreno tuvo que sustituir a su amigo, obligado por las circunstancias. Ahí el que fue seleccionador hasta este 19 de noviembre cometió una deslealtad que Luis Enrique no le perdonó.

Los nueve partidos de Robert Moreno al frente de la Selección española

Según ha avanzado 'Libertad Digital', la ruptura de esta amistad tiene una fecha concreta, el 7 de junio, y el motivo fue una alineación. De los nueve partidos que Moreno dirigió a la Selección española, tres de ellos fueron de manera interina. En el segundo, ante Islas Feroe, aún era Luis Enrique quien dictaba los onces iniciales, aunque a distancia. El asturiano ordenó que colocara a David de Gea en la portería y a Dani Carvajal en el lateral derecho, pero Moreno puso a Kepa Arrizabalaga y a Jesús Navas. 

A Luis Enrique no le sentó nada bien, y así se lo hizo notar, y aunque en el siguiente partido, ante Suecia, sí puso a Carvajal, mantuvo a Kepa bajo palos. La lectura general fue que el portero del Chelsea le había levantado la titularidad en España al del Manchester, que era el portero designado para ser su primero por el seleccionador vigente, aunque no presente, en esos partidos.

Luis Enrique no perdonó que Moreno no respetara sus órdenes cuando aún era su sustituto interino

Ese detalle acabó de enfadar a un Luis Enrique que, en esos momentos, ya estaba con la cabeza más centrada en su hija y menos en el fútbol, por lo que esta indisciplina del que era su segundo no le gustó nada. Nueve días después del partido de Suecia, 'Lucho' dimitió y Robert Moreno fue confirmado como seleccionador no interino. El resto es historia.

Luis Enrique veta a su examigo Robert Moreno como segundo y elige a Unzué

Pero para entonces, Luis Enrique ya le había puesto la cruz. Aunque en ese momento lo único que tenía en mente era la situación de Xana, en el horizonte también miraba la posibilidad de volver a entrenar. Y entonces ya sabía que no iba a contar con el que había sido su mano derecha, que le había traicionado en el momento que más necesitaba que fuese su sustituto sin rechistar, en caso de llegar a un banquillo de nuevo. 

El elegido para ocupar ese cargo ahora será Juan Carlos Unzué, que ya estuvo con Luis Enrique hasta que decidió intentarlo en solitario en el Celta y el Girona.