Qué es la cuestión de confianza que podría convocar Pedro Sánchez y en qué se diferencia de una moción de censura

El presidente en funciones, Pedro Sánchez, aplaude a sus diputados antes de tomar asiento en su escaño a su llegada al debate de su investidura en el Congreso.
¿Qué es y cómo funciona una cuestión de confianza?
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El presidente en funciones, Pedro Sánchez, aplaude a sus diputados antes de tomar asiento en su escaño a su llegada al debate de su investidura en el Congreso.

Tras publicar su carta a la ciudadanía, Pedro Sánchez anunciará el próximo lunes 29 de abril su decisión sobre su continuidad al frente del Gobierno. Todas las opciones están abiertas, ya que el presidente podría dimitir, convocar elecciones o, como tercera vía, convocar una cuestión de confianza para instar al Congreso a decidir sobre su continuidad.

Este instrumento está contemplado por la Constitución, y al contrario que una moción de censura, parte del propio Ejecutivo. Es un mecanismo a través del cual el presidente puede medir sus apoyos y someter su cargo y la continuidad de su programa al voto del Parlamento. ¿En qué consiste? ¿Qué ocurre si la pierde?

¿Qué es y cómo funciona una cuestión de confianza?

El funcionamiento de la cuestión de confianza está recogido por los artículos 112 y 114 de la Constitución y los artículos 173 y 174 del reglamento del Congreso de los Diputados: este proceso es presentado por el Gobierno, previa deliberación en Consejo de Ministros, ante la Mesa del Congreso, que debe informar a los grupos y convocar el Pleno de la Cámara Baja. Puede presentarse para refrendar el apoyo "a su programa o por una cuestión de política general".

El debate de la cuestión de confianza sigue las mismas normas que el de investidura: el presidente del Gobierno realiza una intervención inicial y los grupos exponen su posición, pudiendo el presidente replicar los mismos e intervenir las veces que desee. 

Concluido el debate, se realiza al menos 24 horas después la votación por mayoría simple: si el presidente obtiene más síes que noes, permanece en el cargo al considerarse otorgada la confianza del Congreso para continuar.

¿Qué crees que hará Pedro Sánchez el lunes en su comparecencia tras la carta por sorpresa a la ciudadanía?

Solo dos precedentes en la España constitucional

En caso contrario, y al no obtener la confianza del Congreso, la Constitución establece que el presidente debe presentar su dimisión al Rey, activándose el proceso constitucional para que el Congreso de los Diputados.

Hasta la fecha, solo dos presidentes españoles se han sometido a una cuestión de confianza: Adolfo Suárez lo hizo en 1980, tras aprobar las leyes de la Transición, para aprobar un programa de austeridad y desarrollar el Estado autonómico: el presidente de UCD consiguió la confianza del Congreso por mayoría simple (168 votos a favor, 164 en contra, 2 abstenciones y 4 ausencias).

Diez años más tarde, en 1990, fue el socialista Felipe González quien solicitó una cuestión de confianza sobre su programa político para impulsar la integración económica de España en la UE, la política exterior y el Estado autonómico. El presidente obtuvo el apoyo del Congreso por mayoría absoluta con 176 votos a favor.

¿En qué se diferencia de una moción de censura?

Mientras la cuestión de confianza está propuesta por el Gobierno y perderla supone la dimisión del presidente, la moción de censura es presentada por la oposición y la misma debe ser presentada con un candidato, que se convierte en presidente si la moción sale adelante, sin necesidad de una investidura. 

Si la cuestión de confianza es un instrumento del Gobierno para medir sus apoyos, la moción de censura es un instrumento de la oposición para cesar al Gobierno y nombrar de forma automática e inmediata a un nuevo presidente

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