El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ve insuficientes las disculpas del candidato de EH Bildu a las elecciones vascas, Pello Otxandiano, a las víctimas por "herir su sensibilidad" tras evitar llamar a ETA banda terrorista. Eso sí, ha confirmado que no va a romper sus alianzas parlamentarias y que seguirá pactando con los abertzales para sacar adelante sus medidas sociales.

"Las cosas hay que llamarlas por su nombre, y ETA no fue una organización armada, ni el movimiento de liberación nacional que dijo (el expresidente José María) Aznar. Fue una banda terrorista derrotada por la democracia española gracias a la unidad de los demócratas", ha manifestado Sánchez en una rueda de prensa tras una sesión de trabajo del Consejo Europeo en Bruselas. 

El presidente ha sido "claro" la postura del Gobierno sobre ETA y sus reproches a Otxandiano, pero ha reconocido que seguirá hablando con todas las formaciones políticas, excepto con Vox, para sacar adelante medidas sociales durante lo que resta de la legislatura, como ya lo hizo anteriormente con la revaloración de las pensiones conforme al IPC, la subida del salario mínimo o la gratuidad del transporte público. "Vamos al Congreso de los Diputados como un Gobierno de coalición en minoría parlamentaria y hablamos con todos menos con uno, que es Vox", ha plasmado.

Ha incidido en la idea de que el Gobierno está conformado por dos socios y que Bildu no está entre ellos. "Uno se llama PSOE y el otro, Sumar", ha recalcado, para intentar diferenciar su coalición de Gobierno de sus pactos parlamentarios. "Acordamos medidas que benefician a la mayoría social del país, con eso está dicho todo", ha zanjado Sánchez para capear la contradicción de que el candidato socialista, Eneko Andueza, se sitúe como dique de contención de Bildu en Euskadi, mientras el Gobierno, a través del Grupo Socialista en el Congreso, lo requiera como un socio fiable para sacar adelante su proyecto legislativo. 

Otxandiano no rectifica sus palabras

El Gobierno ya condenó la negativa de Bildu a calificar a ETA como una banda terrorista. Lo hizo la ministra portavoz, Pilar Alegría, desde el Consejo de Ministros, donde tildó la evasiva de una "absoluta falta de respeto" a las víctimas y una demostración del "negacionismo incompatible con la democracia" que sostienen los abertzales. Desde Moncloa tildaron estas palabras de inaceptables, aunque ya avanzaron entonces que seguirían pactando con Bildu en lo que resta de legislatura para sacar adelante sus normas en el Congreso. 

Las disculpas de Otxandiano a las víctimas se hicieron esperar hasta este jueves: en una entrevista en Radio Euskadi dijo que si tras referirse a ETA como "grupo armado" pudo herir la "sensibilidad" de las víctimas, pide "perdón", aunque sin rectificar sus palabras. El candidato de Bildu continuó evitando calificar a la banda como terrorista y, de hecho, en otras declaraciones en TeleBilbao se refirió a la misma como "una trayectoria de 60 años". 

Sánchez ha asegurado que estas disculpas "en absoluto" son suficientes porque las cosas hay que llamarlas "por su nombre", aunque sin cortar su relación parlamentaria con los abertzales.

También ha aprovechado para cargar contra el expresidente José María Aznar cuando en 1995 se refirió a ETA como "movimiento de liberación nacional", y para recalcar que la banda terrorista fue derrotada gracias a la "unidad" de las fuerzas políticas, del conjunto de la sociedad vasca y española, y todo ello "impulsado" por el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, por Alfredo Pérez Rubalcaba como ministro del Interior y por Patxi López como lehendakari.