Es una de las citas más esperadas de la Navidad y no es para menos. Este viernes, los Reyes Magos han recorrido todas las ciudades y pueblos de la geografía española para saludar los más pequeños de la casa antes de dejar los regalos. Por tierra, mar, aire e incluso esquiando (en sierra Nevada), las localidades no han dudado en desplegar todos los medios disponibles para acoger a los Reyes.
Por si quedaba algún medio de transporte sin probar por sus majestades, los reyes se han lanzado este viernes por la tirolina urbana de Cuenca, considerada la más larga de Europa, lo que les ha parecido "espectacular; una gran experiencia".
En Madrid, donde han desfilado por el centro de la ciudad junto a 13 carrizas, cientos de pajes reales y donde han repartido más de 1.500 kilos de caramelos, sus majestades han recordado a los niños y niñas que trabajarán toda la noche para que tengan todo lo que han pedido. "Gracias por cuidar de los niños", han lanzado a los padres, también muy ilusionados por la presencia de los Reyes Magos.
En otra capital, Barcelona, tras el desfile, Melchor no ha dudado en afirmar que el séquito real ha atravesado océanos, ríos y desiertos, sacudidos por las guerras y ha dicho que les apena y que instan a hacer "lo posible y lo imposible" por detenerlas.
A Valencia y Cartagena, por ejemplo, han llegado en barco. "Hemos tardado mucho pero ya estamos aquí. Tenemos muchas ganas de repartir regalos", ha subrayado Gaspar en la ciudad murciana. Por su parte, Melchor ha pedido que en las casas le dejen un dulce típico de estas fechas y ha especificado que le "gusta mucho el roscón de reyes". Y Baltasar ha animado al público a cantar algunos villancicos, como el tradicional Ya vienen los Reyes Magos.
En San Sebastián han subido al Monte Igeldo en coche clásico; a Zaragoza han llegado en helicóptero hasta el estadio de fútbol de La Romareda o en León no han dudado en acudir en tren, donde han sido recibidos en el andén por las emocionadas familias.
Desafiando en muchos casos al frío y a la lluvia (que han obligado a acortar la cabalgata de Granada), los magos y sus coloridos séquitos han repartido miles de caramelos en las distintas cabalgatas, en las que ha habido animaciones, bailes, luces y música. En Pamplona, los Reyes Magos y sus tres camellos -Romeo, Niño y Pesao- han sido recibidos por cientos de niños y mayores pese a la abundante lluvia.
En zonas del norte, como Asturias, algunos desfiles han tenido que ser cancelados por el mal tiempo, con aviso amarillo por fuertes lluvias. Aunque esto no ha sido óbice para que los niños se encontraran con sus majestades, ya que se han adaptado lugares cubiertos para ello. En Lugo, los Reyes Magos han sido recibidos por un inmenso manto de nieve.
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