La tradición de beber cerveza en la puerta de los bares clásicos de Sevilla podría estar permitido con la aprobación de la nueva ordenanza de veladores en la que el Ayuntamiento está trabajando actualmente. Una medida que cumple con el compromiso adquirido por el alcalde, José Luis Sanz, con los hosteleros de estos establecimientos singulares, tras las quejas por la actual norma municipal que prohíbe este hábito popular en los locales que no dispongan de veladores.
Eso sí, será con salvedades, como recoge el borrador de la norma que plantea la limitación de horarios al consumo en la vía pública de forma que podría permitirse durante cuatro horas al día, entre las 12.00 y las 14.00 horas y entre las 20.00 y las 22.00 horas. El texto también propone igualmente una ampliación del horario de apertura de las terrazas con veladores de tal manera que la hora de cierre sería a la una de la madrugada. Actualmente, está fijada a las doce de la noche.
En las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS), cuya actualización es una demanda constante de los hosteleros sevillanos ya que la actual no se renueva desde hace más de catorce años, también se incrementará el horario permitido, de forma que en vez de cerrar las terrazas a las 23.00 horas se podrá hacer a las 00.00 horas.
No obstante, para los establecimientos con veladores el Ayuntamiento endurecerá las sanciones de forma que a aquellos que acumulen dos multas les serán retiradas las mesas. El alcalde de la capital hispalense lo ha confirmado este miércoles en una entrevista en Canal Sur Radio recogida por Europa Press.
Para el regidor, la hostelería es un "motor económico" y, como tal, debe ser "mimado" pero también "hay que ser muy exigentes" en el cumplimiento de las normas para "evitar las molestias que generan en muchas zonas" de la ciudad.
De ahí que el Consistorio, con objeto de lograr un texto de consenso, entregara este martes el mencionado borrador a hosteleros y vecinos, para que hagan sus aportaciones, tras reunirse con ambas partes en la Comisión de Veladores que "no se convocaba desde hacía nueve años". Al final de noviembre volverá a reunirse para seguir avanzando en su confección para que entre en vigor en febrero de 2024, fecha fijada por el Ejecutivo de Sanz.
Según el delegado de Urbanismo, Juan De la Rosa, el objetivo es elaborar un texto que esté "consensuado con todos y garantice la convivencia con los vecinos". De la Rosa ha reiterado que la nueva norma "potencia la labora inspectora" y contempla la revocación de licencias cuando se acumulen dos o más multas por incumplimiento.
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