El euríbor ha cerrado el mes de agosto en un 4,07%, lo que supone la primera bajada en más de un año. Pero, ¿supondrá un respiro para los hipotecados? ¿Se pueden modificar las condiciones de la hipoteca? Como recogen los expertos de iAhorro, estos préstamos son productos financieros que se pueden cambiar a lo largo de los años al negociar con nuestra entidad.

Muchas personas están optando por cambiar su hipoteca a tipo fijo, por una subrogación o por alargar el plazo de amortización, entre otras alternativas, ante la situación económica actual marcada por la inflación. 

Cuáles son las diferencias

"Una opción es amortizar la hipoteca. Consiste en reducir la cuota que estamos pagando o el plazo en el que se terminará de saldar la deuda aportando una cantidad de dinero", explican. Suele ser una opción que utilizan los clientes cuando disponen de ahorros suficientes y buscan saldar parte de la deuda. 

El primer paso será conocer las diferencias entre ambas opciones. Al reducir la cuota, pagaremos menos cada mes por la hipoteca. Si amortizamos el plazo, se reduce el tiempo para devolver el préstamo. La decisión dependerá de "las circunstancias personales y el contexto económico".

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"Por lo general, suele ser más adecuado amortizar plazo que cuota, sobre todo si lo hacemos durante los primeros años de la vida de la hipoteca", aseguran. En nuestro país, las hipotecas siguen el sistema de amortización francés. Esto significa que pagamos los intereses primero y, posteriormente, la cantidad que debemos al banco. "Si amortizamos por plazo, estaremos quitándonos de encima el interés de la hipoteca".

Qué opción es más recomendable

Si se trata de una hipoteca variable, cuyas cuotas han subido considerablemente por la subida de los tipos de interés por parte del BCE en el último año, nos compensará amortizar el plazo si el euríbor crece. 

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"En cuanto a amortizar cuota, puede ser una decisión adecuada si nos estamos viendo en aprietos para afrontar la cuota de la hipoteca", subrayan. Es el caso de las personas que han visto como sus cuotas han subido hasta 300 euros al mes por el alza inflacionista.