El presentador de la televisión rusa Rossiya 1, Vladimir Solovyov, uno de los rostros más populares de Rusia y conocido propagandista de Vladimir Putin, ha cargado duramente contra España y contra el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.

En su programa nocturno, en el que acostumbra a defender la invasión rusa de Ucrania y ataca a todo aquel que considera enemigo del Kremlin, Solovyov ha lanzado duras críticas contra Borrell, a quien responsabiliza de bloquear los acuerdos de paz y de provocar "la muerte de miles de ucranianos".

"Quiero recordar que el idiota, Borrell, el enemigo del pueblo ruso, el enemigo de los eslavos", afirma Solovyov en un discurso en el que también llama al político español "engendro de Satanás" y asegura que en su tumba debería poner que "aquí descansa el enemigo del pueblo ruso y de la humanidad".

También le acusa de actuar como "ministro de la guerra" de la Unión Europea y lo responsabiliza de la guerra en Ucrania: "Él es personalmente culpable de la muerte de cientos de miles de ucranianos porque locos como él hicieron todo lo posible para que no hubiera acuerdos en Estambul.

Pero Solovyov, a quien se conoce en Rusia como 'la voz de Putin', va más allá en sus críticas a Borrell y las extiende a España: "Borrell, quien apoya la destrucción de la cultura ortodoxa en Ucrania, es representante de un país colonizador. Portador de la misma culpa que España, que es el mal del mundo, que durante siglos cargó con la corona del mal del mundo".

No es la primera vez que este peculiar presentador ataca a España, pues el pasado mes de enero ya animó al presidente ruso, Vladimir Putin, a "quemar Madrid" y otras capitales europeas, en represalia por el envío de armamento occidental a Ucrania.

En aquella ocasión, Solovyov responsabilizó a EEUU, Francia, Alemania, España y Reino Unido de la guerra de Ucrania por el envío de armas pesadas "para matar soldados rusos".

"Han volado nuestros oleoductos... están entregando tanques pesados. Berlín, París, Madrid, Londres, Washington deberían estar en llamas. "¿Por qué no se borró Kiev de la faz de la tierra?", dijo.