La Guardia Civil, junto con la Jefatura Provincial de Tráfico en Logroño, ha sancionado a cuatro personas que querían obtener de manera fraudulenta la autorización para conducir vehículos a motor y utilizaron diferentes dispositivos para copiar en el examen teórico.

Según ha informado la Guardia Civil, las actuaciones se llevaron a cabo durante las inspecciones que realizan agentes del Grupo de Investigación y Análisis (GIAT) de la Guardia Civil y examinadores de la Jefatura Provincial a todos los opositores que se presentan a las pruebas para la obtención de los diferentes permisos de conducción.

Estos controles se realizan para evitar las suplantaciones de identidad y cualquier tipo de irregularidad e ilegalidad mediante el uso de equipos electrónicos, como pinganillos, móviles y relojes con memoria, durante el desarrollo de los exámenes.

El comportamiento de los implicados durante las pruebas hizo sospechar a los agentes y examinadores de posibles anomalías, por lo que para no interferir ni alterar el proceso de los exámenes esperaron a que finalizara dicho examen para llevar a cabo su identificación en una sala anexa al aula donde se efectúan las pruebas en Logroño.

Allí se comprobó que estas cuatro personas ocultaban teléfonos móviles, receptores de señal y audífonos entre la ropa y en el oído.

Estos equipos estaban preparados para que durante la realización de la prueba no tuvieran que hablar, sino únicamente enfocar con la cámara y escuchar las respuestas del examen que le comunicaban desde el exterior por el audífono.

Por ello se intervino el material electrónico que portaban, al tiempo que la Jefatura Provincial de Tráfico en La Rioja declaraba a estas personas no aptas en el examen para la obtención del permiso de conducir; además se les ha tramitado una denuncia que conlleva una multa de 500 euros.

Se ha podido constatar que estas cuatro personas, con domicilio en Barcelona, Girona, Navarra y La Rioja, habrían llegado a pagar entre 1.000 y 1.500 euros a las personas que les suministraron los aparatos electrónicos para facilitarles las respuestas el día de los exámenes.

Los implicados no podrán presentarse a las pruebas para la obtención o recuperación del permiso o licencia de conducción u otra autorización administrativa para conducir en el plazo de seis meses.