Qué precauciones debemos tomar antes de salir a pasear con los perros en verano

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Un perro refrescándose en la fuente de un parque durante el verano.
EUROPA PRESS
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España continúa siendo azotada por diferentes olas de calor y, con la llegada de las altas temperaturas, debemos protegernos frente a posibles problemas de salud relacionados, como los golpes de calor (tanto personas, como mascotas).

Es importante conocer las mejores formas de evitar el calor y los trucos para refrescarse durante estos días, especialmente si hablamos de nuestras mascotas, quienes, según Nuria Gómez Constanzo, la experta veterinaria de Clinicanimal, la red de centros veterinarios de Tiendanimal, "no pueden regular su temperatura corporal tan eficientemente como los humanos".

Existen numerosos accesorios con los que podemos ayudar a combatir el calor de nuestros peludos en casa, como bebederos, mantas refrescantes, piscinas hinchables o helados de sabores; pero no podemos olvidarnos de los peligros que podemos encontrar durante los paseos.

Regla de los 5 segundos al pasear con nuestro perro

A la hora de dar un paseo con nuestro perro, lo primero que debemos hacer es evitar las horas de más calor del día, siendo preferible escoger las primeras horas de la mañana o al anochecer para salir junto a nuestros peludos.

La parte de nuestro perro que más debemos cuidar a la hora de dar un paseo son sus almohadillas, ya que, al no disponer de calzado, pueden sufrir quemaduras y heridas debido a las altas temperaturas de la calzada o el asfalto.

Para evitar que esto ocurra, podemos aplicar la regla de los cinco segundos, que consiste en tocar el suelo con la mano (el lado contrario a la palma) y si no aguantamos cinco segundos manteniéndola ahí, significará que nuestro perro se quemará.

Un perro descansa a la sombra en un día de intenso calor.
Un perro descansa a la sombra en un día de intenso calor.
Beatriz Velardiez / EFE

En estos casos, debemos buscar lugares a la sombra o el césped para pasear con nuestros compañeros peludos, ya que estarán a una temperatura más baja y no correrán peligro de dañar sus patitas.

Y, por supuesto, siempre debemos llevar agua fresca con nosotros para facilitársela cada poco tiempo, siendo una buena opción los bebederos portátiles que también se utilizan para los viajes y que mantienen el agua fría.

Por último, si notamos que durante el paseo nuestro peludo jadea mucho o se quiere parar, es posible que sea porque tiene calor. Además de proporcionarle agua fresca, es recomendable que le mojemos las patitas, el hocico y las axilas, ya que son las zonas por las cuales son capaces de regular mejor su temperatura y que les ayudarán a refrescarse.

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