El presidente de la Generalitat en funciones, Ximo Puig, y el candidato del PP y vencedor en las urnas el pasado 28 de mayo, Carlos Mazón, se han reunido este martes por primera vez tras las elecciones con un doble objetivo común: escenificar un traspaso de poderes "dentro de la más absoluta cordialidad" y lanzar un mensaje de tranquilidad y de "certeza y apoyo" a los inversores extranjeros que meditan radicarse en la Comunitat Valenciana. Se trata, en definitiva y según han afirmado ambas partes en un comunicado conjunto, de evitar que este periodo transitorio de la formación de gobierno "sea un inconveniente para las empresas que quieran instalarse en nuestro territorio".

A mediados de mayo, el barón socialista anunció que el Consell estaba manteniendo conversaciones "al más alto nivel" con, al menos, diez multinacionales de "sectores avanzados" que estudian instalarse en la Comunitat Valenciana. En conjunto, se trataría de una inversión potencial de 24.400 millones de euros con un impacto laboral total de 43.000 empleos directos, afirmó.

Las conversaciones se mantienen con empresas internacionales dedicadas al desarrollo de microprocesadores, el hidrógeno verde, las energías renovables, las baterías eléctricas, la producción de componentes, los vehículos eléctricos y el big data. Hace dos semanas, trascendió que Tesla es una de las multinacionales que negocia con la Generalitat para desarrollar un proyecto en el área metropolitana de Valencia que supondrá una gran inversión económica.

Esta ha sido la primera reunión que mantienen Puig y Mazón tras las elecciones, dado que la única celebrada hasta la fecha entre ambas formaciones ha sido entre el conseller de Hacienda en funciones, Arcadi España, la de Política Territorial, Rebeca Torró, y la vicepresidenta del parlamento autonómico, María José Salvador, con el propio presidente del PPCV, su director de campaña, Miguel Barrachina, y su vicesecretario de Organización, Juan Francisco Pérez Llorca. En aquella reunión, el PSPV trasladó al PP su rechazo a facilitar la investidura de Mazón.

El encuentro de este martes se ha hecho público una vez celebrado, por lo que no ha habido posibilidad por parte de los medios de comunicación de formular preguntas. Ambas partes han insistido en la "cortesía institucional" que ha caracterizado la reunión, que se ha producido con carácter previo al traspaso oficial de poderes, que se materializará cuando se lleve a cabo la investidura parlamentaria de Mazón en virtud del acuerdo de gobierno al que llegaron PP y Vox. Este incluye el apoyo de la formación que preside Santiago Abascal al candidato popular a la Presidencia de la Generalitat a cambio de cesiones tanto programáticas como de cargos, entre los que destacan la Vicepresidencia primera, con el torero Vicente Barrera al frente, la presidencia de Les Corts y dos consellerias.

Volkswagen y Ford

La Comunitat Valenciana vivió el año pasado buenas noticias de la mano de las compañías automovilísticas: la llegada de la gigafactoría de Volkswagen a Sagunt y la consolidación de Ford Almussafes como productora de vehículos eléctricos. No obstante, en este último caso, la reconversión de la planta valenciana ha venido acompañada de un expediente de regulación de empleo (ERE) que afecta al 20% de la plantilla, lo que supone 1.100 salidas.

La atracción de inversión extranjera se ha convertido en una de las prioridades del modelo económico de la Comunitat a nivel estructural, es decir, más allá de la coyuntura del partido gobernante en cada momento. Así lo demuestra la reunión mantenida ayer por Puig y Mazón, en la que ambos apuestan por la continuidad de las negociaciones con las multinacionales de cara a su instalación en territorio valenciano.