Conato de incendio entre Pedro Sánchez y Emiliano García Page. La dirección del PSOE, que encabeza el presidente del Gobierno, había decidido imponer en un primer momento como número uno en la lista electoral por Toledo a la que todavía es alcaldesa de la capital, Milagros Tolón. El movimiento suponía el desplazamiento a la segunda posición a Sergio Gutiérrez, mano derecha del presidente de Castilla-La Mancha. Finalmente, la dirección federal ha reculado y respetará que Gutiérrez vaya de 'uno', pero el malestar de los de Page es patente tras advertir de que el Comité Federal que celebrarán este sábado los socialistas "no será pacífico".

Este sábado, Ferraz acogerá la cita para ratificar las listas electorales con las que el PSOE se presentará a las elecciones generales del próximo 23 de julio. Los trabajos para llenarlas han ocupado las agendas de las federaciones durante toda la semana. Las agrupaciones deciden y votan. Pero la última palabra la tiene la dirección federal en el Comité de listas celebrado en la tarde de este viernes. Y no ha sido a gusto de todos. 

Fuentes del PSOE de Castilla-La Mancha denunciaron en la tarde de este viernes la "imposición" de Tolosa, que dejará previsiblemente de ser alcaldesa de Toledo el próximo sábado. El PSOE ganó allí las elecciones, pero el PP suma mayoría absoluta con Vox. Su elección como número uno desplazaba a Gutiérrez al número dos. Todo, destacan las mismas fuentes, pese a que su liderazgo fue aprobado por unanimidad en el comité provincial de Toledo esta semana, que contó con más de 300 asistentes. "Representan al 90% de las agrupaciones locales", añaden.

Esto ha provocado un "gran malestar" en el PSOE castellanomanchego, desde donde se define este movimiento como un "capricho personal". "El Comité de mañana no va a ser lo pacífico que debería", habían alertado. Tras filtrarse el decontento, finalmente Ferraz se ha echado atrás y ha decidido respetar la decisión de las bases. Aunque a medias, puesto que Tolosa -cuyo nombre no aparecía en las listas- finalmente será la número dos. Esto ha atemperado algo los ánimos, pero el malestar sigue existiendo.

Las mismas fuentes señalan que no ha sido una situación aislada, puesto que denuncian que se están produciendo movimientos similares "en otras federaciones". Ejemplo de ello es Ignacio Urquizu, que ni ha llegado a la Comisión de listas de este viernes. El todavía alcalde de Alcañiz fue propuesto por el Comité Provincial del PSOE de Teruel al haber sido escogido por las agrupaciones locales. Sin embargo, Ferraz decidió vetarle, como ya ocurrió en 2019 y su nombre ni llegó a la dirección regional.

Unas listas hechas a medida de Sánchez

El presidente ha hecho las listas electorales a su medida. Y ha dejado varias lecturas. En primer lugar, ha querido premiar a casi todos sus ministros, que le acompañarán en las listas. El ejemplo perfecto es la papeleta de Madrid, que encabeza él mismo. Le seguirán Teresa Ribera, vicepresidenta tercera; y Margarita Robles, titular de Defensa, como 2 y 4. Los cinco primeros puestos los cierran Félix Bolaños, ministro de Presidencia y hombre de total confianza del jefe del Ejecutivo; y José Manuel Albares, titular de Exteriores, que inaugura presencia en la papeleta electoral.

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Pilar Alegría, ministra de Educación y portavoz del PSOE, ocupará el número uno por Zaragoza. La vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, hará lo propio en Sevilla, siendo Alfonso Rodríguez de Celis su número dos. El titular de Sanidad, José Miñones, encabezará la papeleta por A Coruña. Y los electores que opten por la opción del PSOE en Valencia verán arriba del todo a Diana Morant, ministra de Ciencia.

Pero también el presidente ha optado por premiar a cargos autonómicos y municipales que se vieron eclipsados por la ola azul del pasado 28 de mayo. Es el caso de los regidores de Alcalá, Javier Rodríguez Palacios; Arganda del Rey, Guillermo Hita; o Valladolid, Óscar Puente. También intentarán ser diputadas Concha Andreu, presidenta en funciones de La Rioja; y Francina Armengol, de las Islas Baleares.

Otra de las lecturas de las listas es que el presidente quiere controlar lo máximo posible el grupo parlamentario. Por lo que pueda pasar el 23 de julio. Para ello ha recuperado a pesos pesados como José Luis Ábalos, Carmen Calvo o Adriana Lastra, el núcleo duro con el que ganó las primarias de 2017; y ha introducido en puestos de salida a su jefe de Gabinete, Óscar López, y a Antonio Hernando, con quien mantuvo discrepancias por la abstención a Mariano Rajoy pero que ahora ocupa un puesto en la Moncloa.