La inflación vuelve a subir después de seis meses y apunta a un nuevo récord histórico en el precio de los alimentos

La inflación subyacente se dispara al 7,5% en enero.
La inflación subyacente se dispara al 7,5% en enero.
Henar de Pedro
La inflación subyacente se dispara al 7,5% en enero.

Tras cinco meses consecutivos de descensos, los precios han vuelto a subir en enero, coincidiendo con la retirada con carácter general del descuento de 20 céntimos por litro de carburante y pese a la rebaja del IVA. Según los datos provisionales avanzados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de variación anual del IPC se sitúa en un 5,8%, una décima por encima del dato de diciembre. Más acusada es la subida de la inflación subyacente, que se dispara en enero hasta el 7,5%, el dato más abultado de la serie histórica.

De este modo, los precios rompen con la tendencia experimentada durante el último medio año y la inflación vuelve a crecer seis meses después de tocar techo en el mes de julio, cuando la variación anual del IPC llegó al 10,8%. Desde ese máximo en la serie histórica, los precios habían moderado su encarecimiento hasta registrar una tasa del 5,7% en diciembre. La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha afirmado este lunes que el dato del 5,8% en enero es una "buena noticia", porque indica que la inflación "prácticamente se ha estabilizado". En cambio, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha calificado la cifra de "preocupante". En términos mensuales, el IPC desciende tres décimas con respecto a diciembre, frente al incremento del 0,2% del mes anterior y la bajada del 0,4% de comienzos de 2022.

El INE apunta en su avance a que el repunte en términos interanuales de una décima del IPC podría deberse a que los precios de los carburantes han subido en el último mes más de lo que lo hicieron en enero de 2022. De hecho, se esperaba el incremento en el precio del diésel y de la gasolina, ya que el pasado 1 de enero finalizó, con carácter general, la bonificación de 20 céntimos por litro de carburante, que ahora se aplica únicamente a profesionales del transporte por carretera, agricultores, navieras y pescadores. 

Asimismo, Estadística también señala que el descenso de los precios del vestido y del calzado en el arranque de 2023 ha sido menor al producido a principios del año anterior. En cambio, según el avance, los precios de la electricidad sí bajaron más en enero de lo que lo hicieron en el mismo periodo de 2022. 

La subyacente remonta medio punto y se sitúa en el 7,5%

En relación a la electricidad precisamente, el INE ha introducido cambios metodológicos en el cálculo de la estimación del IPC, un dato provisional que el organismo publica a finales de cada mes. Además de considerar el mercado regulado, por primera vez se han incorporado los mercados libres de la electricidad y el gas y se ha tenido en cuenta también ponderaciones procedentes de la Contabilidad Nacional, que pasa a tomarse como referencia principal para estructurar las ponderaciones de los distintos componentes en lugar de la Encuesta de Presupuestos Familiares. Según Estadística, esta modificación tiene como objetivo adaptar el índice a la normativa europea y mejorar su calidad.

Récord de la subyacente

De confirmarse las cifras adelantadas por Estadística, la inflación subyacente, que excluye el precio de la energía y el de los alimentos no elaborados por su alta volatilidad, se habría disparado en enero cinco décimas hasta el 7,5%, marcando así un nuevo récord en la serie histórica, desde diciembre de 1986. Hace un año, en enero de 2022, el dato se situaba en el 2,4%. De este modo, se amplía la distancia entre la tasa general y la subyacente a 1,7 puntos y podría crecer aún más, ya que, según ha expresado Calviño este lunes, el Gobierno espera que la inflación subyacente alcance su "pico" a lo largo del primer trimestre del año, para emprender posteriormente la senda "positiva" de la recuperación.

A falta de conocer el dato desagregado, esta escalada de la inflación subyacente podría apuntar a un nuevo máximo histórico en el precio de los alimentos, ya que, una vez excluida la energía, este componente es uno de los que más contribuye el IPC subyacente, si bien ha perdido peso con el cambio metodológico. La inflación de los alimentos creció en diciembre a un ritmo del 15,7%, su tasa interanual más elevada desde 1994. 

El encarecimiento de esta categoría de productos llevó al Gobierno a anunciar a partir del 1 de enero una rebaja del IVA de productos de primera necesidad, cuya aplicación no ha estado exenta de polémica por su falta de repercusión en el coste de la lista de la compra y cuyos efectos se podrán comprobar cuando se conozca a mediados del mes que viene el dato definitivo de inflación. En ese sentido, la vicepresidenta primera del Gobierno ha asegurado que, aunque todavía no haya datos, la medida se ha trasladado "al bolsillo" de los ciudadanos.

Por el contrario, UGT ha denunciado que el "comportamiento abusivo" de algunas empresas y sectores, entre ellos el de la alimentación, está presionando los precios al alza para elevar sus beneficios. Po ello, el sindicato ha manifestado la necesidad de subir los salarios y de limitar los márgenes empresariales para garantizar que la ciudadanía y las familias trabajadoras mantengan su capacidad adquisitiva y no tengan que renunciar a la compra de productos básicos. "A los ciudadanos les está costando mucho poder llegar a final de mes, por eso creo que es una noticia que nos obliga desde el punto de vista de la necesidad de subir los salarios", ha expresado Álvarez.

La inflación vuelve a subir y apunta a un nuevo récord histórico
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